miércoles, diciembre 24

La oración de millones de católicos aupó la sanación del Santo Padre

Desde el 14 de febrero de este año, el papa Francisco, líder de los católicos en el mundo, estuvo hospitalizado debido a un cuadro clínico grave cuyo diagnóstico fue el de neumonía bilateral, el cual lo hizo experimentar varios episodios críticos por su avanzada edad.

Para los fieles creyentes en la Iglesia Universal, Apostólica y Romana, una sola cosa ha podido influir en la mejoría del Santa Padre: la oración que por intercesión de María Santísima ha dados estos resultados en su salud, tras los 37 días que estuvo en el hospital Gemelli de Roma..

Así lo expresa el presbítero Hernán Portillo, sacerdote de Maracaibo, quien ahorita se encuentra en la ciudad de Padua, y con quien se tuvo una entrevista para conocer cómo se vive este momento histórico de la Iglesia, específicamente en Italia.

Portillo, quien ha vivido en lo personal el poder curativo de la oración por intercesión de María Santísima, expone que la Iglesia en este tiempo de Cuaresma basa su acción en tres elementos fundamentales como son la oración, el ayuno y la penitencia.

Estos tres elementos encauzan la preparación para los días de la Semana Santa y precisamente, en este contexto se ha desarrollado la enfermedad del Pastor de unos mil 400 millones de creyentes católicos, quienes han unido con su fuerza espiritual, la plegaria por la salud de Francisco.

Refiere el sacerdote egresado del Instituto Niños Cantores del Zulia, que las diversas apariciones de la Virgen María basan su mensaje en el empeño de cumplir con la oración permanente a Jesús, ya sea a través del Santo Rosario o de plegarias cortas.

«Ella se convierte en el hilo comunicante entre lo humano y lo Divino, que es Dios, en sus tres personas, Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo, para darnos paz a nuestra alma y respuestas a nuestras necesidades«.

En medio del estrés humano que causó saber que el papa Francisco se mantuvo hospitalizado, y que apenas se le vio una vez en este tiempo, las oraciones de millones y millones de voces en el mundo se suceden una tras otras pidiendo a Dios mantenerlo al frente de la Iglesia, y Dios ha escuchado estas súplicas dando signos alentadores para su salud.

El Papa Francisco rezó el Ángelus en privado en el Hospital Gemelli - Vatican News

Portillo sostiene que la oración es la herramienta necesaria para obtener resultados milagrosos en los momentos cuando pensamos que ya no hay nada que hacer según las leyes terrenales.

Abundan en el padre Hernán ejemplos de manifestaciones magnificas del amor de Dios hacia sus hijos, las cuales se han logrado a través de esa comunicación especial, íntima, sincera y profunda.

Hoy el papa Francisco está sintiendo ese obrar misericordioso de la Fe, que con la oración lo ayuda a sanar de una peligrosas enfermedad, que se hace más peligrosa debido a su avanzada edad.

Los peregrinos que asisten al Año Jubilar al Vaticano por estos días, no solo van a la Basilica de San Pedro a pasar por la Puerta Santa, sino que también asisten al hospital Gemelli para depositar in situ su esperanza por lograr una recuperación total, con sus plegarias al Dios Todopoderoso.

La Iglesia sigue adelante

El pasado 5 de marzo, con el Miércoles de Ceniza se dio inicio al tiempo de preparación espiritual para conmemorar la Pascua.

La Cuaresma significa para el católico practicante, un momento de profunda reflexión personal sobre su Fe donde, además, debe cumplir con tareas muy específicas relacionadas con lo que le corresponde hacer durante la Semana Mayor, como es el amor por el prójimo.

Es por ello que la introspección personal va acompañada por el ayuno, que según el mensaje dado por la Virgen María a la vidente Mirjana en la localidad de Medjugorje, le pide que sea dos veces a la semana (miércoles y viernes). El ayuno consiste en solo comer pan y agua, según el mensaje dado.

En este sentido la Iglesia continúa adelante en su trabajo en cada una de las parroquias en el mundo, llevando su predicación sobre el dogma de Fe que es la creencia en un solo Dios, único y verdadero, que a su vez lo conforma la Santísima Trinidad.

Tanto es así que el papa Francisco, pese a sus dificultades corporales, ha continuado trabajando desde el hospital, alternando el descanso con la oración y algunas tareas laborales. También escribió una carta titulada «Desarmemos la tierra«, en la que hizo un llamado al fin de los conflictos armados en el mundo.

Para finalizar, Portillo señala que la oración «es la herramienta que tenemos los cristianos para superar los momentos convulsos de nuestra era, donde pareciera que triunfan los antivalores, pero no es así porque Dios pondrá todo en su justa dimensión como lo creó, solo que nos llama a aferrarnos a él com mucha fortaleza espiritual«.

Por: Edgar Bolívar