Tras varias semanas de promoción que consiguieron elevar al máximo las expectativas y la emoción de aquellos que llevaban muchos años esperando el debut de la afamada heroína “Black widow” como protagonista absoluta de una película de Marvel, el estreno de la cinta homónima se tradujo en una pobre recaudación en taquilla, al menos en comparación con otros blockbusters de la firma, que se explica fundamentalmente con el estreno simultáneo de la película en el servicio de streaming Disney +.
Aunque el rendimiento del filme en cines ha mejorado sensiblemente desde entonces, ya se puede decir sin temor a equivocarse que “Black widow” es una de las entregas menos rentables del universo cinematográfico de Marvel. Este dudoso honor llevó hace unos días a Scarlett Johansson, su protagonista, a demandar directamente a la multinacional Disney + por haber provocado una notable reducción en los ingresos que ella pretendía recibir por el producto.
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Los abogados de la estrella de cine aseguran que el contrato de la artista especificaba que su salario dependería en buena medida del desempeño comercial de “Black widow” en las salas de cine. Evidentemente, los suscriptores de Disney + no tenían necesidad alguna de salir de casa para poder disfrutar de la película, que llegó al servicio de televisión el mismo día de su estreno y sin que conllevara un costo adicional. Esa es la clave que explica la merma en las ganancias de Scarlett y su consiguiente enfado.
Sin embargo, la compañía no se ha quedado callada ante la embestida judicial de la artista -de quien se rumora espera su segundo hijo junto a su marido Colin Jost-, y ha entregado al magistrado un documento lleno de argumentaciones legales y “morales” con las que exhibir su desacuerdo con las posiciones que defiende la actriz, a la que además se acusa de haber mostrado “escasa sensibilidad” ante la situación pandémica.
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“La demanda no tiene base legal ni mérito alguno. De hecho, este recurso es especialmente triste e indignante teniendo en cuenta su escasa sensibilidad acerca de los efectos globales de la pandemia de Covid-19”, señalan los letrados de la compañía Disney para justificar su decisión de facilitar a todos los espectadores, sobre todo a aquellos que han de limitar al máximo sus salidas a la vía pública, el acceso a tan esperada película.
Por: Agencia