lunes, julio 1

La Cedeao, «lista» para intervenir en Níger, sin descartar nueva misión diplomática

Los países de África occidental aseguraron el viernes que estaban «listos» para intervenir militarmente en Níger y fijaron una fecha para pasar a la acción, aunque el sábado podrían enviar una misión a ese país para tratar de restablecer pacíficamente el orden constitucional.

«Estamos listos para intervenir desde el momento en que se dé la orden. También se ha fijado el día de la intervención», declaró el comisionado de Asuntos Políticos, Paz y Seguridad de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao), Abdel-Fatau Musah.

Los jefes militares de la Cedeao se citaron desde el jueves en Accra, la capital ghanesa, tres semanas después del golpe de Estado que depuso el 26 de julio al presidente Mohamed Bazoum en Níger.

La reunión permitió acordar los «objetivos estratégicos, el equipamiento necesario y el compromiso de los Estados miembros» para la posible intervención, detalló Musah. Pero al mismo tiempo, el bloque regional indicó que existía una «posibilidad» de que una misión de la Cedeao viaje el sábado a Niamey, la capital nigerina, «para proseguir la búsqueda de una vía pacífica».

«Estamos dispuestos a resolver el problema por la vía pacífica, pero para bailar el tango hacen falta dos», insistió Musah.

Las anteriores misiones de la Cedeao no fueron recibidas por el nuevo hombre fuerte del país, el general Abdourahamane Tiani.

El nuevo régimen considera que cualquier intervención militar contra su país constituiría una «agresión ilegal e insensata» y prometió una «respuesta inmediata» a cualquier ofensiva.

Níger era un aliado clave de los países occidentales en la lucha contra los grupos yihadistas que operan en el Sahel, una larga franja semiárida que bordea el desierto del Sáhara por el sur.

Graves consecuencias

En una cumbre celebrada el 10 de agosto, la organización había decidido activar una «fuerza de reserva para restaurar el orden constitucional» en el país.

En los últimos días se multiplicaron los llamados a una solución pacífica, algunos procedentes de socios occidentales como Estados Unidos, que el miércoles anunció el nombramiento de una nueva embajadora en la nación africana.

La elección del presidente Bazoum en 2021 fue un momento clave para Níger, ya que supuso el primer traspaso de poder pacífico desde su independencia de Francia en 1960. Pero desde el golpe, Bazoum se encuentra retenido en su residencia junto a su mujer y su hijo.

«Las condiciones de detención del presidente Bazoum se deterioran. Cualquier nueva degradación de su estado de salud tendrá graves consecuencias», advirtió el presidente de Nigeria, Bola Tinubu, en una conversación con el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.

Una responsable de la Unión Europea (UE) indicó que Michel reiteró «el apoyo total de la UE a las decisiones de la Cedeao, así como la firme condena del golpe de fuerza inaceptable en Níger».

«La UE no reconocerá a las autoridades surgidas del golpe. El presidente Bazoum, elegido democráticamente, sigue siendo el jefe de Estado legítimo de Níger», insistió.

Desde Ginebra, el alto comisionado para los Derechos Humanos de la ONU, Volker Türk, también expresó inquietud por la decisión de los militares de procesar a Bazoum y a sus colaboradores por alta traición.

«Esta decisión no sólo tiene motivaciones políticas contra un presidente elegido democráticamente, sino que carece de base legal, ya que se ha impedido el normal funcionamiento de las instituciones democráticas», afirmó en un comunicado.

En una entrevista a The New York Times, el primer ministro nombrado por los militares, Ali Mahaman Lamine Zeine, dijo que «no le ocurrirá nada» al presidente. «No tenemos tradición de violencia en Níger», agregó.

También aseguró que los militares nigerinos no tenían ninguna intención de colaborar con Rusia o con el grupo paramilitar ruso Wagner, como hicieron los golpistas en el vecino Malí.

Al menos 28 civiles murieron a principios de semana en episodios de violencia en varias ciudades del sudoeste de Níger, cerca de Malí, indicaron el viernes varias fuentes a la AFP.

«Por el momento, hemos contabilizado al menos 28 muertos, pero el balance puede aumentar», dijo a la AFP un alto responsable de la región de Tillabéri, donde se produjeron las muertes.

Por: Agencias / Foto: Cortesía