El líder norcoreano, Kim Jong-un, dijo que «no hay contenido para el diálogo con el enemigo» y que «no sienten la necesidad de hacerlo», según recogieron hoy medios estatales, tras el reciente aumento de las tensiones en la península coreana.
«Los enemigos siguen hablando de diálogo y negociación mientras nos amenazan militarmente, pero nosotros no tenemos contenido para el diálogo y no sentimos la necesidad de hacerlo», dijo Kim en declaraciones publicadas este lunes por la agencia estatal KCNA.
El líder norcoreano afirmó que «deben enviar acciones más poderosas y decididas, así como una señal más clara a los enemigos que escalan la situación regional involucrando a sus enormes fuerzas armadas».
Las declaraciones de Kim coinciden con unos ejercicios militares llevados a cabo por Pionyang entre el 25 de septiembre y 9 de octubre, según confirmó hoy KCNA, que se vieron motivados por la llegada a la zona del portaaviones USS Ronald Reagan y su grupo de ataque para participar en unas maniobras junto a Corea del Sur y Japón.
Kim añadió que «se encuentran vigilando con rigor la situación de seguridad en la península coreana y las maniobras militares de los enemigos» y que estarían preparados para «tomar con firmeza contramedidas militares si es necesario».
Por su parte, el presidente surcoreano Yoon Suk-yeol dijo este lunes que la península de Corea y el noreste de Asia se enfrentan a una situación de seguridad «grave», horas después de que el país vecino anunciara que había practicado el transporte de ojivas nucleares durante sus ejercicios militares.
«Es importante reconocer la grave realidad de seguridad en la Península de Corea y en el noreste de Asia y prepararse adecuadamente», dijo Yoon en declaraciones recogidas por la agencia surcoreana Yonhap, donde añadió que «proteger la vida y la seguridad de las personas no es una cuestión de palabras, sino un problema de la vida real».
Por: Agencia