No es solo Maracaibo, más de 200 kilómetros de la Costa Oriental del Lago, también exhiben en sus riberas los constantes derrames petroleros, producto de fugas sin corregir, desde el año 2015, cuando se comenzó a alertar de la peligrosa situación que se estaba generando y que hoy en día se ha intensificado y unido al verdín para concluir en olores nauseabundos, muerte de fauna marina, empobrecimiento de pescadores, afectación turística e incontables daños ambientales.
Así lo dio a conocer el legislador del CLEZ, por la COL, Justo Bermúdez, quien destacó que la estatal petrolera tiene muchos años conociendo el problema, pero sin aplicar las soluciones de fondo, las cuales pasan por la corrección definitiva de las fugas que originan los constantes derrames petroleros y la rehabilitación y puesta en funcionamiento de las plantas de tratamiento, las cuales se encuentran inoperativas, y muchas de ellas desmanteladas, por lo que las aguas residuales son vertidas crudas a las aguas de nuestro principal reservorio lacustre.
“La gran mancha negra que vemos en las costas se esparce a todo lo largo y ancho, impactando directamente en la actividad pesquera, el ecosistema marino y las enfermedades asociadas a vías respiratorias y piel, pues con la descomposición del conocido verdín o cianobacterias, surgen las complicaciones enunciadas por los especialistas en salud«, indicó Bermúdez.
Destacó el legislador y presidente de la Comisión de Desarrollo Económico y Finanzas del Clez que es fácil omitir el problema y no asumir responsabilidades, en este caso, la acción de devolver la normalidad a las aguas del Lago de Maracaibo reposa en Pdvsa y en el Iclam, este último organismo es el encargado de coordinar las labores para mantener y preservar este estuario gigante en condiciones favorables para la navegación, el turismo, la pesca y el disfrute de propios y visitantes.
Igualmente agregó que reposa en la Asamblea Nacional , desde hace varios años, un proyecto de Ley de Saneamiento Ambiental, el cual hoy es imprescindible que se actualice y se discuta para que haya una normativa vigente que rija las actividades en el Lago de Maracaibo, y se envíen recursos a los estados y municipios para que también puedan desplegar planes de limpieza, mantenimiento y conservación, los cuales son efectuados hoy en día, en su mayoría por oenegés comprometidas con la preservación de los espacios.
Por: Nota de prensa