Después de todo, es posible que usar un reloj inteligente o un rastreador de actividad física no sea una bendición para su salud. Más bien, podría exponer la piel a «productos químicos para siempre» dañinos.
Las bandas contienen una clase de sustancias químicas sintéticas presentes en muchos productos cotidianos, como utensilios de cocina, cosméticos y envases de alimentos, anotaron investigadores de la Universidad de Notre Dame en Notre Dame, Indiana.
Y la exposición a estas sustancias químicas puede provocar daño hepático, enfermedad de la tiroides, obesidad, disminución de la fertilidad, ciertos tipos de cáncer y otros problemas de salud, según han demostrado los estudios.
Para esta investigación, los investigadores probaron la composición de las correas de los relojes inteligentes vendidos por Apple, Apple/Nike, CASETiFY, Fitbit, Google, King of Kings, Modal, Samsung, Tighesen y Vanjua. Pero se negaron a identificar a las marcas que dieron positivo.
«No tenemos los recursos ni la misión de ‘acusar’ o ‘limpiar’ ninguna marca, pero confiamos en los consumidores preocupados para ayudar a mantener la transparencia de la industria en lo que respecta a las PFAS en sus productos«, dijo el coautor del estudio, Graham Peaslee, a UPI.
Las sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas, llamadas PFAS por sus siglas en inglés, repelen el agua, el sudor y el aceite.
En particular, las correas de reloj inteligente más caras compuestas de caucho sintético fluorado albergan altos niveles de un tipo específico de PFAS: ácido perfluorohexanoico o PFHxA.
«Este estudio fue inusual en el sentido de que rara vez hemos visto un solo PFAS en un producto de consumo. Por lo general, se miden docenas de tipos diferentes, y este estaba dominado en gran medida por uno solo: PFHxA«, dijo Peaslee, profesor emérito del Departamento de Física y Astronomía de la Universidad de Notre Dame.
«La cantidad que estaba presente, y que se podía extraer fácilmente, era de cientos a miles de veces más alta de lo que habíamos visto en otros productos«, dijo Peaslee. En general, añadió, se trata de «una fuente muy inusual de PFAS que puede llegar directamente a la piel«.
Peaslee y sus colegas publicaron sus hallazgos recientemente en Environmental Science & Technology Letters, una revista de la American Chemical Society.
Aunque la durabilidad de estas pulseras es buena para los entrenamientos sudorosos, también presenta una posible fuente para que estos compuestos se absorban fácilmente en el cuerpo, apuntaron los investigadores.
Los investigadores investigaron varias correas de reloj disponibles comercialmente para detectar la presencia de flúor, así como 20 PFAS individuales. Examinaron 22 pulseras de una variedad de marcas y a diferentes precios. La mayoría de las bandas eran nuevas, pero algunas ya habían sido usadas.
Las 13 bandas anunciadas como hechas de fluoroelastómeros tenían el elemento flúor. Pero dos de las nueve bandas que no anunciaban estar compuestas de fluoroelastómeros también contenían flúor, lo que sugiere la posible presencia de PFAS.
Las pulseras que costaban más de 30 dólares tenían más flúor que las que costaban menos de 15 dólares.
Después de una extracción química, los investigadores revisaron todas las pulseras en busca de 20 PFAS diferentes. El PFHxA fue el más común, existente en nueve de las 22 pulseras probadas.
La concentración media de PFHxA fue de casi 800 partes por mil millones, y una muestra superó las 16.000 ppb. A modo de comparación, la investigación del equipo en 2023 sobre cosméticos encontró una concentración media de unas 200 ppb de PFAS.
«Descubrimos que varias correas de reloj contenían concentraciones extraíbles muy altas de un solo PFAS, PFHxA, lo cual es muy preocupante ya que estos productos se usan regularmente en contacto con la piel«, dijo Alyssa Wicks, primera autora del estudio y estudiante graduada en el laboratorio de Peaslee en Notre Dame.
«Como investigador de PFAS, no he visto concentraciones tan altas, sobre todo para un solo tipo de PFAS, en ningún otro producto de consumo portátil«, dijo Wicks.
Los científicos no saben qué tan fácilmente la piel absorbe PFHxA, o los peligros potenciales para la salud que representa una vez que lo hace.
En el apéndice del estudio, los investigadores enumeraron las pulseras que evaluaron. Sin embargo, «el conjunto de muestras es tan pequeño que no tenemos estadísticas suficientes para afirmar si todas las empresas se ven afectadas, o si se incluyen todos los productos de una empresa en particular«, dijo Peaslee.
Wicks añadió que el equipo recomienda comprar pulseras de menor costo hechas de silicona. Si un consumidor quiere comprar una banda de mayor precio, sugiere leer las descripciones de los productos y evitar cualquier cosa que figure como que contenga fluoroelastómeros.
Otros expertos elogiaron a los investigadores por verificar las concentraciones químicas en las pulseras de los rastreadores de actividad física.
«Es un estudio interesante publicado en una revista de alta calidad«, dijo Courtney Carignan, profesora asistente de la Universidad Estatal de Michigan en East Lansing y experta en exposiciones a PFAS y efectos en la salud. Ella no participó en el estudio.
Carignan añadió que «es preocupante saber que estas sustancias químicas pueden estar en algunas pulseras de reloj en concentraciones relativamente altas«.
Esas sustancias afectan a la función inmunitaria y a los niveles hormonales de colesterol, además de aumentar los riesgos de ciertos tipos de cáncer, dijo, y aconsejó que los consumidores pregunten a los proveedores si los productos están libres de PFAS.
Las personas deben limitar el uso de estas pulseras cargadas de químicos y evitar almacenarlas cerca de la ropa, sobre todo de la ropa interior, dijo Miriam Diamond, profesora de la Facultad de Medio Ambiente de la Universidad de Toronto. Ha estudiado las PFAS en productos de consumo.
«Este estudio se suma a muchos otros que muestran la deuda ambiental que estamos acumulando«, dijo Diamond. «Las PFAS son realmente una sustancia química ‘para siempre‘».
Por: Agencia


