El gobierno nacional a través del Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología (Mincyt), con la Alianza Científico – Campesina, promueve avances en el campo de la biotecnología agrícola para garantizar la seguridad alimentaria del país.
Científicos del Instituto de Biología Experimental (IBE) de la Universidad Central de Venezuela (UCV), en alianza con la empresa biotecnológica Agrobiotechs, desarrollan un proyecto innovador que se dirige hacia la producción de inoculantes agrícolas a base de microorganismos: hongos y bacterias, para semillas de maíz.
Esta innovación será implementada en un programa de siembra de 30 mil hectáreas en el territorio nacional para el periodo lluvioso del 2024.
El doctor Blas Dorta, líder del proyecto y jefe del Laboratorio de Procesos Fermentativos del IBE, indicó que el objetivo de esta investigación es sustituir los agentes químicos de amplio espectro, que son utilizados para tratar las semillas, por biofertilizantes y bioinsecticidas amigables con el ambiente.
“Las semillas deben ser tratadas con agentes que las protejan del ataque de hongos fitopatógenos y de insectos que están en el suelo. Es decir, que una vez que tú siembres, esa semilla pueda germinar y pueda llevar adelante su función como planta. Entonces, si las semillas no son tratadas con agentes que puedan proteger frente a esos organismos que están en el suelo, esas semillas se van a destruir y se pueden generar pérdidas bien considerables”, explicó.
El especialista en bioquímica destacó que, comúnmente, los agentes químicos utilizados para tratar las plantas son dañinos para el ambiente; por tanto, de la mano de la Alianza Científico-Campesina se han propuesto crear una agricultura sana y sustentable.
Con el impulso de este producto innovador creado por especialistas de la UCV, Venezuela rompe el paradigma en control de plagas y enfermedades agrícolas y continúa avanzando hacia la sostenibilidad ambiental.
“Estamos dando un paso importante con el apoyo del Ministerio de Ciencia y Tecnología para generar un producto biológico en sustitución de uno químico, de forma tal que podemos decir que estamos rompiendo un paradigma en lo que a control de plagas y enfermedades agrícolas se refiere”, puntualizó Dorta.
El proceso
En la Unidad de Investigación y Desarrollo, los investigadores del IBE con apoyo y financiamiento del Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología, masifican los microorganismos que van a utilizar para crear los bioinsumos que van a adherirse a las semillas de maíz.
Para la creación de los insecticidas y fertilizantes biológicos son utilizadas las bacterias entomopatógenas; Bacillus thuringiensis, variedad kurstaki y Bacillus thuringiensis, variedad tenebrionis, así como tres agentes aislados bacterianos: Asosphilus, Acectobacter y Bacillus subtilis y el hongo antagonista Trichoderma asperellum.
Estos microorganismos son fijadores de nitrógenos, fertilizantes orgánicos y mineralizadoras de fósforos, que fueron aislados de la rizósfera del maíz, para realizar el tratamiento en las semillas.
“Aquí estamos trabajando con organismos que han sido aislados del medio natural, que son sus habitantes normales de las raíces de las plantas y suelos. Lo que estamos haciendo es maximizar su permanencia en ello, de manera que puedan garantizar su desarrollo sin necesidad de utilizar agroquímicos”, así lo aseguró la doctora Cruz Salazar, jefa de la Unidad de Investigación y Desarrollo de Agrobiotechs.
Destacó que, una vez realizadas las pruebas y control en algunas semillas, los productos son distribuidos a productores en todo el país, para su posterior aplicación en cultivos.
Los bioinsumos desarrollados por los investigadores venezolanos están bajo la supervisión, control y registro del Instituto Nacional de Salud Agrícola Integral (INSAI), ente regulador de las actividades agrícolas del país.
La investigadora destacó que “este proyecto es un sueño de mucho tiempo que hoy está dando resultados prometedores para el país”.
En un futuro, el producto biológico podrá ser adherido a otros tipos de semillas, en aras de garantizar alimentos sanos para la ciudadanía.
Este avance en la biotecnología agrícola es un testimonio del compromiso del Gobierno Bolivariano con la innovación, la preservación de la vida en el planeta y la salvación de la especie humana.
Nota de prensa.