domingo, diciembre 22

Horror en Florida: Un niño fue golpeado brutalmente por su padre como castigo por mover un cojín

El 7 de diciembre, en una residencia de Kissimmee, Florida, ocurrió un caso de abuso infantil que involucró a Lance Eugene Rachel y Kimberly Corene Rachel, ambos padres del menor afectado. El incidente inició cuando Lance Rachel, molesto por el movimiento de un cojín del sofá, acusó al niño de mentir y procedió a castigarlo de manera maliciosa, según informó la Oficina del Sheriff del Condado de Osceola a través de un comunicado compartido en Facebook.

Durante un periodo de casi media hora, el menor fue sometido a un trato físico y verbalmente abusivo, que incluyó más de 50 golpes, estrangulamiento y amenazas de romperle la mandíbula por parte de su padre, informa Infobae. 

El caso llegó a las autoridades a mediados de diciembre diciembre gracias a la intervención del Departamento de Niños y Familias de Florida y la Oficina del Sheriff del Condado de Osceola.

“El 16 de diciembre, el Sr. Rachel fue entrevistado por detectives y proporcionó información, confirmando el abuso. Además, su esposa, Kimberly Rachel, fue arrestada por no denunciar el conocido abuso infantil.

Parte del abuso fue captado en cámaras de vigilancia instaladas en la vivienda, lo que proporcionó evidencia directa del incidente. Lance Rachel, al ser interrogado por los detectives, admitió los hechos, según el comunicado oficial.

“La víctima fue golpeada más de 50 veces con un cinturón. También fue estrangulado y lo llamaron con varios nombres despectivos y otras obscenidades”, declararon los agentes de la OCSO.

Aunque no especificaron qué términos fueron utilizados de manera peyorativa contra el menor de edad, sí destacaron que, durante el incidente, Rachel le gritó a la víctima “que le rompería la mandíbula”, según lamentaron los policías de la oficina del sheriff.

El abuso completo al que hace referencia la policía del condado de Osceola duró un total de 28 minutos, parte del cual fue captado por algunas de las cámaras de vigilancia del hogar.

Los padres ya enfrentan a la justicia

Tras la recopilación de pruebas y el testimonio de los involucrados, Lance fue detenido por los agentes del orden. Por su parte, Kimberly también enfrentó cargos, ya que no intervino ni denunció el abuso conocido, lo que la hizo responsable legalmente de omisión en la protección del menor, según detallaron las autoridades en el comunicado.

De acuerdo con la información disponible en línea del sistema de Correccionales y Cárceles del Condado de Osceola, Lance fue acusado de abuso infantil agravado, además de un cargo por agresión por estrangulamiento.

En un video difundido por la Oficina del Sheriff, se mostró a ambos acusados siendo escoltados esposados fuera de la propiedad.

“El castigo corporal a un hijo es una cosa, pero el abuso infantil y los excesos van en contra de la ley”, afirmó Marcos R. López, sheriff del condado de Osceola al final del video compartido por los agentes del orden, donde subrayó la diferencia entre lo aceptable y el abuso infantil, destacando que los excesos cometidos en este caso violaron la ley.

Este caso resalta la importancia de la vigilancia y acción oportuna frente a señales de abuso infantil, así como las implicaciones legales para quienes, como padres o tutores, tienen el deber de proteger a los menores bajo su cuidado.

La Ley de Florida entiende por abuso agravado infantil cuando se castiga maliciosamente o tortura deliberadamente a un niño.

Abuso infantil se refiere a causar lesiones físicas o mentales a un niño de manera intencionada.

“La malicia puede establecerse por circunstancias de las cuales se podría concluir que un padre razonable no habría participado en los actos perjudiciales hacia el niño por ninguna razón válida y que el propósito principal de los actos era causarle a la víctima dolor o daño injustificados”, según se lee en los estatutos de Florida de 2024.

Por: Agencias / Foto: Cortesía