Gleison Briceño (51) y su hijo de 8 años fueron arrollados el pasado 19 de enero en el sector 18 de Octubre de Maracaibo en un caso donde se encuentra involucrada la influencer Valeria Carruyo, y que ha impactado a la opinión pública de nuevo porque implica a un miembro activo de las redes sociales.
Briceño emitió este 21 de enero una declaración desde la cama donde yace convaleciente en el hospital Universitario de Maracaibo y su relato indica cómo ocurrieron los hechos la tarde del domingo donde deja ver que la culpabilidad no recae en él.
El hombre que sufrió múltiples fracturas en sus miembros inferiores fue sometido a una intervención quirúrgica donde le implantaron clavos para rearmar sus huesos.
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Su hijo también es tratado en el hospital Universitario afectado con una lesión en la pierna derecha. Ambos fueron remitidos allí por el personal de primeros auxilios que llegó a la escena.
Briceño explicó a Foco Informativo que él se encontraba a bordo de su motocicleta parado en el semáforo esperando la luz verde para continuar su camino, cuando cambia la luz verde arranca y allí es el momento que fue impactado por el automóvil.
Señala que «cuando ella me «bombea», me cae la moto encima«, nota que el automóvil le queda muy cerca y observa que aceleran el carro, pero los neumáticos resbalan ya que el caucho de la moto lo estaba paralizando, allí saca fuerzas y grita que no dejen ir al carro y los curiosos entonces intervienen y se atraviesan.
Al verse sin salida, el conductor baja del carro y la gente le señala que le había partido la pierna y es cuando observa que es una mujer quien manejaba porque se desespera al ver la situación. Luego Briceño cae en el desmayo producto de las lesiones.
Asegura que hay videos de la zona donde se corrobora la declaración que da sobre el desarrollo del accidente.
Expone que luego se entera que la mujer desaparece de la escena y llega un funcionario del Cicpc junto a otro joven en defensa de la conductora quienes indican que «ellos correrían con los gastos y venimos a dar la cara por ella«. Esa noche compraron los medicamentos solicitados en el centro de salud y desde entonces no han aparecido más por el hospital.
Briceño se encuentra atribulado por la situación de indefensión económica que pasa ahora su familia debido a que su condición le impedirá trabajar por un lapso de por lo menos un año.
Tiene tres hijos: una niña de 15 años en el liceo, otra de 4 años y el varón que está recluido en el hospital cuyos gastos para atender la situación son imposibles de costear para ellos que son una familia humilde.
Reclama la presencia de la influencer Valeria Carruyo porque «necesito hablar con ella, está huyendo, y necesito que dé la cara«, expresa con su tono de preocupación.
Por: Edgar Bolívar