El secretario general de la ONU, António Guterres, afirmó este domingo estar apenado por la «trágica pérdida de vidas» causada por el terremoto registrado este sábado en la zona meridional de Haití que dejó al menos 724 fallecidos y mil m800 heridos, y apuntó que la organización está lista para prestar ayuda.
«Naciones Unidas, junto con la comunidad humanitaria en Haití, está apoyando los esfuerzos del Gobierno de asistir a los afectados por el terremoto, y está lista para facilitar un mayor apoyo en la respuesta», aseveró un comunicado del portavoz de la ONU Stephane Dujarric enviado en nombre de Guterres.
El secretario general quiso además transmitir sus «profundas condolencias» tanto a los familiares de las víctimas como al Gobierno de Haití.
En un informe oficial, la ONU señala que además de los fallecidos y unos mil 800 heridos, alrededor de 700 edificios se han derrumbado, entre ellos hospitales y colegios, mientras que al menos tres mil 800 casas han quedado destruidas y las infraestructuras y las carreteras de la isla han sufrido daños significativos.
Asimismo, la organización apunta que existen «limitaciones para el acceso humanitario severas» además de una «frágil situación de seguridad», lo que complican «enormemente» la respuesta humanitaria.
El sismo asoló el sur y otras zonas de Haití y agravó la ya de por sí difícil situación del empobrecido país caribeño.
El terremoto, que ya forma parte los diez sismos más letales de los últimos 25 años en Latinoamérica, se registró a las 08.29 hora local (12.29 GMT) del sábado, a unos 12 kilómetros de la localidad de Saint-Louis du Sud, con un epicentro de 10 kilómetros de profundidad.
También se sintió en la República Dominicana y Cuba, de acuerdo con el Servicio Geológico de los Estados Unidos.
Por: Agencia