Guardias libios mataron a tiros a seis migrantes africanos este viernes en un centro de detención de Trípoli, informó la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), y denunció las «terribles» condiciones de vida en el complejo superpoblado.
El incidente se produjo en el centro de detención Al-Mabani de Trípoli, donde unos 3.000 migrantes están retenidos, dijo a la AFP el jefe de la OIM, Federico Soda. «Los guardias mataron a seis migrantes en total«, explicó.
«No sabemos qué provocó el incidente, pero está relacionado con el hacinamiento de los inmigrantes en el centro. Viven en condiciones terribles y tensas«, afirmó. «Muchos migrantes escaparon durante el caos«, agregó.
Medios libios informaron mediante videos que cientos de migrantes habían escapado del centro.
Según el responsable de la OIM, el centro de detención de Al-Mabani tiene capacidad para 1.000 detenidos, pero más de 3.000 estaban hacinados adentro, incluidos unos 2.000 que permanecían fuera del edificio principal dentro del perímetro del complejo.
«Su detención es arbitraria. Muchos de ellos tienen papeles en regla pero están atrapados en el país«, señaló.
Libia es un importante punto de paso para decenas de miles de migrantes, en su mayoría procedentes de países de África sahariana, que intentan llegar a Europa cada año a través de la costa italiana, a unos 300 kilómetros del litoral libio.
Varias oenegés denuncian regularmente las condiciones en los centros de detención en Libia, donde contrabandistas y traficantes se han aprovechado en los últimos diez años de la inestabilidad que siguió a la revuelta de 2011 y han convertido al país en el eje del tráfico de personas en el continente.
«Crímenes contra la humanidad»
A principios de octubre, una operación «antidrogas» de las autoridades libias en una barriada de Trípoli, que involucró sobre todo a migrantes indocumentados, dejó un muerto y al menos quince heridos, según la Misión de apoyo de Naciones Unidas en Libia (MANUL).
Al menos 5.000 personas, incluyendo mujeres y niños, fueron detenidas, según la organización Médicos Sin Fronteras (MSF).
El lunes, una misión de investigación de expertos de la ONU publicó un informe en el que denunció «crímenes de guerra» y «crímenes contra la humanidad» cometidos en Libia desde 2016, especialmente contra migrantes.
Los migrantes sufren todo tipo de violaciones «en los centros de detención y por parte de los traficantes«, recogía el texto.
«Nuestra investigación muestra que los actores estatales y no estatales perpetran agresiones contra migrantes a gran escala, con un alto grado de organización y animados por el Estado«, señalaba el informe.
«Un conjunto de características que llevan a pensar que se trata de crímenes contra la humanidad«.
Tragedias
Libia es escenario de numerosas tragedias relacionadas con la migración irregular. El martes, se encontraron los cuerpos de 17 migrantes en la costa de ese país, tras el naufragio de su embarcación.
El número de migrantes fallecidos en el mar durante su travesía hacia Europa se duplicó con creces este año en comparación con el mismo período de 2020, según datos de julio de la OIM.
En septiembre, la OIM contabilizó 1.369 migrantes ahogados en el Mediterráneo en lo que va del año.
Libia intenta pasar la página de una década de caos desde la caída en 2011 del régimen de Muamar Gadafi, derrocado y muerto después de ocho meses de revuelta popular en la estela de la Primavera Árabe.
Tras años de combates, en marzo de este año se estableció un gobierno de unidad auspiciado por la ONU. En principio, el país debe celebrar elecciones en diciembre y enero, pero la organización de los comicios es toda una quimera, habida cuenta de las enormes divisiones que siguen existiendo.
Por Agencia