La dirigente sindical Belkis Bolívar rechazó este domingo la entrega de juguetes que hizo el Gobierno de Venezuela, entre los que se incluyen las figuras de “Súper Bigote” y “Súper Cilita”, dos personajes tipo superhéroes creados por el Ejecutivo, basados en el presidente Nicolás Maduro y su esposa, la diputada Cilia Flores.
“Las prioridades del Gobierno están invertidas, regalan juguetes ideologizantes a los niños, pero le niegan el derecho a una educación de calidad, a tener un sistema de salud digno”, indicó a EFE la integrante de la Federación Venezolana de Maestros (FVM).
La vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, informó este domingo que el Gobierno entregó casi 13 millones de juguetes a niños de distintos sectores del país, entre ellos Las Tejerías, una localidad cercana a Caracas afectada por un deslave a principios de octubre que cobró la vida de, al menos, 54 personas.
La entrega de juguetes incluía bicicletas y las figuras de “Súper Bigote” y “Súper Cilita”, lo que también ha provocado reacciones en las redes sociales.
Gasto irrelevante
A juicio de Bolívar, esto representa un gasto “irrelevante”, dejando a un lado “lo realmente importante como lo es el servicio educativo”.
“Mientras tanto, nuestras escuelas se están cayendo, los docentes mal pagados, sin seguridad social. Los hospitales también (están) con muy pocos insumos o ninguno, el personal de salud con salarios muy bajos”, añadió.
El Instituto de Altos Estudios Sindicales (Inaesin) de Venezuela afirmó el pasado 16 de diciembre que durante noviembre se registraron 67 conflictos laborales, en su mayoría del sector educativo y sanitario.
“El mayor porcentaje de conflictos fue protagonizado por trabajadores del sector educación, hasta con un 40,68 % del total del mes”, señaló la organización en su boletín informativo mensual difundido en su página web.
El segundo con mayor cantidad de reclamos laborales fue el sanitario (13,56%).
La organización explicó que los principales motivos de reclamo fueron por los “bajos salarios” (64,18 %), seguido de las malas condiciones de trabajo (10,45 %).
Por: Agencia