Con dos goles del delantero Germán Cano, Fluminense rescató el miércoles un empate 2-2 ante Internacional en el partido de ida de las semifinales de la Copa Libertadores.
En un encuentro que se le había complicado al cuadro carioca a partir de la expulsión del lateral Samuel Xavier al final del primer tiempo, un tanto del argentino a los 79 minutos mantuvo la serie abierta para el choque de vuelta el próximo miércoles en Porto Alegre.
La noche se prometía plácida para los locales tras el primer grito de Cano a los 11 minutos. El máximo artillero de la Libertadores — con 11 anotaciones en 10 compromisos — finalizó dentro del área una jugada que se inició con un robo de Jhon Arias y continuó con la asistencia de John Kennedy.
“Fue un partido muy disputado. Jugamos con uno menos durante casi 50 minutos. Fuimos un equipo de guerreros y luchamos hasta el final”, dijo Cano, quien llegó a 35 goles en 2023. “Tenemos que seguir así para ganar allí y pasar a la final”.
Además de la diana que abrió el marcador, el comienzo del trámite fue frenético y contó con una consecución de ataques.
El arquero Fábio, que llegó a 98 presencias en el historial del torneo regional, salvó la valla de Fluminense en dos claras ocasiones de Enner Valencia y Wanderson.
Por su parte, el uruguayo Sergio Rochet también evitó una nueva caída de Internacional en una llegada de Keno.
“Generamos muchas situaciones de gol. Cuando haces trabajar al portero rival es porque estás en el camino correcto”, declaró el técnico de Internacional, el argentino Eduardo Coudet. “Vamos a intentar hacer un gran partido en casa, ante un gran rival. Estamos más vivos que nunca”.
Cuando se acercaba el período de descanso, el libreto del cotejo cambió por completo. Samuel Xavier cometió la segunda falta en un lapso de seis minutos sobre Valencia y fue expulsado por doble amonestación.
“Estoy contento por lo que hicimos, pero el punto negativo fue el arbitraje”, se quejó Fernando Diniz, entrenador de Fluminense y, al mismo tiempo, seleccionador interino de Brasil. “En la primera jugada de Samuel, no mereció tarjeta amarilla, es un partido de Libertadores. Luego, cuando lo expulsaron, al principio me enojé con él, pero cuando vi la jugada, se nota que quitó el pie”.
El caos se apoderó de Fluminense, que se desordenó y encajó el tanto del empate en el tiempo agregado tras un centro preciso de René, que fue rematado de cabeza por Hugo Mallo. La jugada había sido anulada en primera instancia por fuera de juego, pero la revisión del VAR convalidó el gol.
“Nos vamos con un sabor agridulce. Tuvimos oportunidades, pero no pudimos sentenciar el partido”, indicó Mallo, que llegó a Inter tras jugar 14 temporadas con el Celta de Vigo en España. “Queríamos ganar, pero ahora jugaremos una final en casa con nuestra afición”.
Fluminense sufrió la sustitución antes de la reanudación de Paulo Henrique Ganso, que en el primer tiempo había sido el eje del Tricolor en el centro del campo.
Inter se acomodó mejor en el comienzo del segundo tiempo y aprovechó la superioridad numérica para adelantarse a los 64 minutos con la quinta diana en el certamen de Alan Patrick, luego de una rápida acción colectiva que culminó con un regate ante Marcelo y una fina definición.
Gabriel Mercado había marcado antes el gol de la remontada parcial, pero fue anulado tras la revisión en el videoarbitraje por tocar el balón con la mano después de rematar con la cabeza.
Con la ventaja, el equipo gaúcho dio un paso atrás para defender el resultado y Fluminense tomó un segundo aire con el aliento de las más de 67 mil personas que se dieron cita en el estadio Maracaná de Río de Janeiro, que también será sede de la final de la Libertadores el 4 de noviembre.
A poco más de 10 minutos para el final del tiempo reglamentario, Nino prolongó un tiro de esquina y Cano remató sobre la marca de Hugo Mallo para decretar el empate definitivo.
Por: Agencia