El fiscal general de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, reveló este miércoles ante el Consejo de Seguridad de la ONU la existencia de pruebas que implicarían a grupos militares en los crímenes contra civiles cometidos en varias ciudades de Libia, donde se encuentra de visita oficial desde el pasado sábado.
“Hemos obtenido pruebas e información sobre actos de la violencia cometidos por grupos militares (…). Sean quienes sean los responsables de los crímenes, deberán rendir cuentas”, declaró Khan durante la presentación telemática de su informe, el vigésimo cuarto sobre este país.
El responsable británico consideró que, “en las condiciones actuales”, su oficina podrá pedir a los jueces que emitan nuevas órdenes de arresto, así como cerrar los mandatos existentes dentro de los plazos establecidos, y defendió abrir una investigación exhaustiva desde 2011 hasta la actualidad, publica EFE.
Las investigaciones, señaló, se han acelerado en el último semestre gracias a la colaboración con las autoridades- tanto del este como del oeste- y al aumento del personal, lo que le ha permitido recoger cerca de un millar de archivos con pruebas y testimonios.
Fiscal de la CPI informa sobre crímenes
Asimismo relató haberse reunido este martes con familiares de las víctimas de la ciudad de Tarhuna, a 90 kilómetros de Trípoli y considerada leal al entonces dictador Muamar Gadafi, donde se han localizado cerca de un centenar de fosas comunes, aunque sólo algunos cuerpos han sido identificados.
Detrás de estos crímenes, la Autoridad Pública de Búsqueda e Identificación de Personas Desaparecidas estima que al menos 300 desaparecieron entre 2015 y 2020 y señala como responsable a la milicia Al Kaniyat, afín al mariscal Jalifa Hafter -el hombre fuerte del este del país- con el que se reunió ayer en Bengasi (este), aunque no trascendieron los detalles de este encuentro.
A su llegada a Libia -en la primera visita de un fiscal del CPI desde 2012- Khan se entrevistó con responsables locales, entre ellos el presidente del Consejo Presidencial, Mohamed al Manfi; el nuevo enviado de la misión especial de la ONU en Libia (UNSMIL), Abdoulaye Bathily, y la ministra de Justicia del Gobierno de Unión Nacional, Halima al Busifi.
La CPI investiga presuntos crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad y actos de genocidio cometidos en la última década -en la que han perdido la vida más de 8 mil personas- y ha emitido órdenes de arresto de varios líderes, incluido Seif al Islam, primogénito del dictador.
Por: Agencia