Cuando la FIFA se dispone a anunciar el jueves los escenarios de la Copa del Mundo de 2026, descartando a ciudades importantes — Alan Rothenberg recordó el proceso de selección de los estadios del torneo de 1994 en Estados Unidos que orquestó.
“Le dieron los derechos al país anfitrión, y el anfitrión se encargó básicamente de todo”, dijo. “Aquí, todo es dirigido por la FIFA. Ha sido un proceso largo y arduo. Los requisitos han realmente difíciles para las ciudades”.
Un total de 17 estadios en 16 zonas metropolitanas pujan para quedar en la lista definitiva de entre 10 y 12 que escenificarán los partidos en Estados Unidos para el primer Mundial con 48 selecciones, y que tendrá a México y Canadá como coanfitriones.
Estados Unidos albergará 60 de los 80 partidos, de acuerdo con el plan de la FIFA, incluyendo todos los encuentros a partir de los cuartos de final.
Para 1994, el anuncio de los nueve estadios de Estados Unidos se hizo en una rueda de prensa en el hotel Waldorf-Astoria, a 816 días del partido inaugural. Esta vez, las decisiones serán reveladas por la FIFA en un estudio de la cadena Fox con 1.456 días de anticipación.
Al evaluar las ciudades candidatas, se pueden identificar varias categorías:
—Fijos: el estadio AT&T en Arlington, Texas, y el Met Life en East Rutherford, Nueva Jersey, además del SoFi en Inglewood o el Rose Bowl en Pasadena, California.
—Casi: el estadio Mercedes-Benz en Atlanta; el M&T Bank en Baltimore; el Gillette en Foxborough, Massachusetts; el NRG en Houston; el Arrowhead en Kansas City, Missouri; el Hard Rock en Miami Gardens, Florida; el Nissan en Nashville, Tennessee; el Lincoln Financial Field en Filadelfia; el Levi’s en Santa Clara, California; y el Lumen Field en Seattle.
—Probablemente no: el estadio Paul Brown en Cincinnati; el Empower Field Mile High en Denver; y el Camping World en Orlando, Florida.
“Este país tiene más de 17 ciudades capaces de recibir el Mundial, y será penoso por las que quedarán descartadas”, dijo Andrés Cantor, el comentarista de Telemundo que ha transmitido cada torneo desde 1990 y participará en el anuncio de las sedes. “Pero no creo que le reste nada al fervor del aficionado de ir los partidos, sin importar a dónde le toque jugar su país en 2026”.
No hay misterio en cuanto a las sedes en México y Canadá, con 10 partidos en cada país.
Los mexicanos propusieron como sedes los estadios BBVA en Monterrey, en el norte del país; el Akron de Guadalajara, en el occidente; y el icónico Azteca en la Ciudad de México, localizada en el centro. Las tres ciudades recibieron partidos en los mundiales realizados previamente en el país, aunque los estadios de Monterrey y Guadalajara son de reciente creación.
El Azteca en la capital de México fue el escenario de las finales de 1970 y 1986, y se convertirá en el primer estadio con tres mundiales.
“He tenido oportunidad de estar en otros estadios, sí pueden ser más modernos, más bonitos, pero pierden esa alma, ese corazón y esa historia”, dijo Emilio Azcarraga, el dueño de Televisa, la cadena de televisión mexicana propietaria del estadio Azteca. “Y el estadio para el 2026 va a ser, no nada más el estadio más funcional, sino el estadio que más alma y corazón va a tener”.
El BMO Field de Toronto y el B.C. Place de Vancouver son los escenarios favoritos en Canadá. El estadio Commonwealth en Edmonton no sería tomado en cuenta.
Rothenberg dice que la incertidumbre ha imperado hasta la última semana en la puja entre el SoFi, que precisaría de una costosa renovación para ampliar las dimensiones de la cancha, y el Rose Bowl.
“Ahora mismo las consultas por teléfono no paran”, dijo el martes. “El comité local de Los Ángeles estará negociando con la FIFA hasta el mismo momento del anuncio. El costo en Los Ángeles representan el aspecto más difícil”.
Apenas dos de los estadios aspirantes fueron escenarios en 1994: el Rose Bowl y el de Orland. Los clubes de la MLS han construido ciudades deportivas de primer nivel, teniéndose así una infrastructura superior a la del primer Mundial en Estados Unidos, cuando Italia se entrenó en Pingry, una escuela de secundaria en Basking Ridge, Nueva Jersey.
Por: Agencia