Este domingo el milagroso retablo de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá subió a su nicho luego de cumplirse el cronograma de festejos parroquiales por su manifestación, tras el recorrido de la procesión de La Aurora, que como año tras año, estuvo acompañada por miles fieles.
El último recorrido por la parroquia tuvo su inicio con la misa oficiada por monseñor José Luis Azuaje, Arzobispo de Maracaibo, quien estuvo acompañado por el párroco Nedward Andrade y otros oficiantes pertenecientes al clero regional.
Cumplida el oficio religioso comenzó el alegre recorrido lleno de fe por diversas calles durante toda la madrugada, llegando a la plazoleta de la Basílica de Nuestra señora del Rosario de Chiquinquirá y San Juan de Dios aproximadamente a las 6 de la mañana.
Allí fue recibida por el conjunto Barrio Obrero que ofrendó con sus tradicionales gaitas los canticos eternos a la Madre espiritual de todos los venezolanos.
Antes de las 7 de la mañana, La Chinita ya había entrado de nuevo a su casa donde siempre está a la espera de los creyentes en su advocación mariana para llenarlos de vitalidad espiritual y aumentar la fe en su hijo, el señor Jesucristo.
Por: Edgar Bolívar / Fotos: José Manuel Sánchez