Este 12 de junio, familiares de los privados de libertad se congregaron frente al Circuito Judicial de la capital del estado Mérida para exigir la protección de sus derechos y una pronta solución a las condiciones que enfrentan en las cárceles venezolanas, razón por la que siguen en una huelga de hambre.
Rosangelica Correa Vera, cuyo hermano tiene 10 años en una cárcel, expresó con una voz corrompida por el llanto su desesperación.
“Es justo que él salga. Está pagando por algo que no hizo. Tengo 4 niños y soy madre soltera, además tengo una mamá enferma. Pido la libertad de mi hermano”, dijo en declaraciones concedidas a Radio Fe y Alegría Noticias.
Otra manifestante, madre de un interno en el retén de Polimérida, sector Glorias Patrias, manifestó su preocupación por las condiciones en las que se encuentran los presos que están cumpliendo con la huelga de hambre para pedir por sus derechos.
“Mi hijo ya tiene 6 años y 4 meses privado de libertad. Están pasando hambre y solo comen caramelos. Le pedimos a la Defensoría del Pueblo y al presidente que nos den una solución”, comentó.
Francisca Hernández, madre de una interna merideña trasladada al Instituto Nacional de Orientación Femenina (INOF) de Caracas, también hizo un llamado desesperado por la salud de su hija.
“Mi hija está enferma, tiene un problema en el seno y no la han podido atender. Soy una señora de 70 años y llevo 2 años sin ver a mi hija. Pido que me la trasladen de vuelta a Mérida”, dijo.
Aura Flores, otra madre presente en la manifestación, detalló las dificultades que enfrenta para visitar a su hijo, quien fue trasladado a San Cristóbal.
“Él ya asumió su condena, pero hace dos años lo llevaron a San Cristóbal y no puedo visitarlo por los costos de pasajes y comida. He pedido su traslado y beneficios por su buena conducta. Pido que traigan de vuelta a Mérida a todos los muchachos que sacaron del penal”, indicó.
Las familiares presentes clamaron por atención a los casos mencionados. Esperan que sus voces sean escuchadas y que se tomen medidas para mejorar las condiciones de los privados de libertad.
Por Agencia.