sábado, mayo 18

Falta de recursos y de asistencia inciden en altos índices de suicidio

La situación económica del país, la falta de atención y de programas de salud en cuanto a salud mental, pero también la información sensacionalista y cargada de detalles han incidido en los altos índices de suicidio en Venezuela.

Así lo indicaron el médico psiquiatra Robert Lespinasse, expresidente de la Sociedad Venezolana de Psiquiatría, y el periodista Emmanuel Rivas, integrante de la ONG Caleidoscopio Humano, especializada en dar atención a personas con problemas de salud mental.

“Tenemos un deterioro marcado en la atención de la salud mental en Venezuela. La mayoría de los establecimientos están cerrados, no tienen recursos ni personal”, aseveró Lespinasse.

El médico advirtió que es grave la carencia de hospitalizaciones, recursos y de una política de información y de notificación y prevención en el país, y que solamente ONG como Caleidoscopio Humano han dado al trabajo, según detalla Mundo UR.

Resaltó que a muchas personas han visto reducido su tiempo en el trabajo porque el salario no les alcanza para pagar el transporte desde su hogar hasta el sitio donde laboran.

Criticó que menos del uno por ciento del presupuesto nacional en salud se destina a la parte de salud mental.

“Tenemos un aspecto de la salud, que es el bienestar completo físico, mental y social, que está abandonado. Hospitalizar un paciente en Venezuela es imposible”, enfatizó Lespinasse.

Llamó la atención en la necesidad de concientizar en que 90 por ciento de los casos de suicidio están relacionados con problemas de salud mental.

Sensacionalismo puede animar al suicidio

El periodista Emmanuel Rivas, cuestionó el tratamiento sensacionalista y con abundancia de detalles que muchas veces se otorga a los casos de suicidio.

“El manejo comunicacional que se le está dando al tema lleva a que las cifras se incrementen, con un poco amarillismo dando muchos detalles a las personas, sin tomar en cuenta que hay personas vulnerables que pueden tomar esta información e ir a atentar contra su vida”, explicó.

Desde su perspectiva, en lo primero que estamos fallando como país es en que no hay políticas públicas nacionales, ni regionales ni municipales para atender el problema de la salud mental.

“Hay otro problema y es que hay personas que tienen que escoger entere su salud mental y su alimentación. Muchas personas tienen que decidir entre su salud y alimentarse”, añadió.

Recordó que una consulta con un especialista en salud mental cuesta entre $ 20 y $ 30 y esto se suma a que generalmente el problema no se resuelve con una consulta, sino que se trata de un período que hay que cubrir con consultas y tratamientos que convierten este tipo de atención en algo muy costoso.

Por: Agencias / Foto: Cortesía