Mañana sábado se producirá el último eclipse de Luna de 2023 que será de tipo parcial y podrá verse desde cinco continentes: Asia, Oceanía, Europa, África y América oriental.
El eclipse completo durará 4 horas y 18 minutos. Durante este tiempo, la Tierra se colocará entre la Luna y el Sol, de forma alineada o a punto de estarlo, impidiendo que parte de la luz de la estrella llegue a su satélite, reseñó EFE.
El evento ocurrirá cuando Latinoamérica se encuentre de día. Por lo tanto, no podrá visualizarse completamente en esta región. Mientras que los observadores de Europa, África, Asia y Australia sí podrán disfrutarlo con mayor calidad.
Eclipse modesto
El eclipse de Luna de mañana será «modesto» (de magnitud 0,12) ya que «solo se verá una pequeña muesca oscurecida en un extremo sur de la Luna, el grado de oscurecimiento será muy escaso», explicó el astrónomo del OAN Miguel Querejeta.
Los científicos calculan que solo un 6% de la Luna quedará cubierta por la umbra de la Tierra. El eclipse que tendrá lugar mañana, en concreto, podrá ser disfrutado a simple vista, aunque se verá mejor en lugares con cielos no cubiertos y sin contaminación lumínica. Tanto el uso de prismáticos como de telescopios permitirán contemplarlo con más detalle.
A diferencia de los eclipses solares, los eclipses de Luna pueden observarse sin ningún riesgo.
Por Agencia