La ministra de Defensa de España, Margarita Robles, ha acusado al Gobierno de Marruecos de hacer «chantaje» a España, después de que entre el lunes y el martes de esta semana retirara la vigilancia de su lado de la frontera con el enclave español de Ceuta y se produjera la entrada de alrededor de 8.000 personas de manera irregular.
«No vamos a aceptar chantajes, la integridad de España no es negociable ni está en juego y vamos a usar todos los medios necesarios para garantizar la integridad territorial y vigilar las fronteras», ha sostenido Robles en una entrevista en la radio pública.
Además, la ministra también ha acusado a Marruecos de vulnerar las normas del derecho internacional, «lanzando» a sus ciudadanos a cruzar la frontera, incluido a menores de edad, por lo que ha advertido que «con España no se juega».
La titular de Defensa ha estimado que Marruecos «tiene que considerar lo que ha hecho en los últimos días», ya que «no solo se lo ha hecho a España, sino a la Unión Europea».
España ha sufrido «una agresión»
Por su parte, la vicepresidenta primera del Gobierno de España, Carmen Calvo, ha sido, junto a Robles, la voz más contundente del gabinete de Pedro Sánchez. Este martes, Calvo sostuvo que España había sufrido «una agresión» a sus fronteras.
A pesar de ello, deseó que la situación «remonte» en pos de «unas relaciones que tienen que ser de cooperación y vecindad» y se refirió a que la embajadora de Marruecos en España haya sido llamada a consultas: «Le he deseado que vuelva pronto y sigamos trabajando», afirmó.
Este miércoles Marruecos volvió a establecer vigilancia en la frontera y cerró el flujo migratorio. Por su parte, las autoridades españolas han informado de que ya han procedido a devolver a suelo marroquí a 5.600 personas. RT
Por Agencia