El coordinador especial de la ONU para el proceso de paz en Medio Oriente, Tor Wennesland, confesó estar «horrorizado» este miércoles por los enfrentamientos entre musulmanes y policías israelíes en la mezquita de Al Aqsa y llamó a mantener el statu quo de los lugares sagrados de Jerusalén.
«Estoy horrorizado por las imágenes de violencia dentro de la mezquita. Estoy preocupado por la aparente golpiza contra palestinos por parte de las fuerzas de seguridad israelíes y el gran número de arrestos», indicó Wennesland en un comunicado, en el que también rechazó «el almacenamiento y uso de fuegos artificiales y rocas por parte de palestinos» dentro del templo.
La madrugada de este miércoles, grandes grupos de fieles musulmanes que querían pasar la noche dentro de la mezquita de Al Aqsa, ubicada en la Ciudad Vieja de Jerusalén Este ocupado, se enfrentaron con fuerzas israelíes que los desalojaron a la fuerza.
Imágenes de los disturbios esta madrugada en la mezquita de Al Aqsa, en Jerusalén, entre los fieles palestinos y la policía de Israel.#Canal24Horas
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Videos difundidos en internet muestran a los uniformados armados golpeando con sus toletes a numerosos musulmanes que se encontraban arrodillados en el piso, y empujando violentamente a fieles que rezaban frente a sus alfombras en la Explanada de las Mezquitas.
Las imágenes también mostraban a hombres encapuchados lanzando fuegos artificiales desde el interior de la mezquita.
Según la Policía israelí, «jóvenes enmascarados se atrincheraron violentamente en la mezquita con fuegos de artificio, palos y rocas» pese a intentos fallidos de «negociar para que salieran», por lo que sus agentes irrumpieron en el templo, se enfrentaron con ellos, y arrestaron a más de 350.
Fuentes palestinas denunciaron un «uso excesivo de la fuerza» por parte de la Policía, destacaron que el número de detenidos supera los 500 e informaron que al menos 25 resultaron heridos.
A estos eventos siguió un intercambio de proyectiles entre Gaza e Israel, en el primer incidente grave desde el comienzo del mes sagrado musulmán de Ramadán, que esta semana se solapa con la Pascua judía.
BREAKING: Israeli police brutally beat Palestinian worshippers inside al Aqsa mosque in Jerusalem during Ramadan. pic.twitter.com/IiFU10qI5c
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«Este período sagrado y los lugares de culto deben ser para una reflexión religiosa segura y pacífica», indicó Wennesland, llamando a los líderes políticos, religiosos y comunitarios de ambos lados «a que rechacen la retórica incendiaria y las acciones provocativas».
«Debe mantenerse el statu quo histórico de los lugares sagrados», subrayó.
Según el statu quo vigente desde 1967, cuando Israel ocupó la parte este de Jerusalén, la Explanada de las Mezquitas está reservada exclusivamente al culto de musulmanes y Jordania quedó a cargo de la custodia el lugar.
Los episodios de este miércoles elevan significativamente la tensión en el marco del conflicto palestino-israelí, que ha dejado 92 palestinos muertos y 15 del lado israelí en lo que va de 2023.
Por: Agencias / Foto: Cortesía