viernes, noviembre 22

El transporte público italiano se paraliza para protestar contra Meloni

El transporte público de toda Italia ha sufrido este viernes importantes retrasos y anulaciones debido a la huelga general convocada por varios sindicatos minoritarios para protestar contra algunas medidas implementadas por el nuevo Gobierno de la ultraderechista Giorgia Meloni, al que acusan también de no tener en cuenta sus peticiones.

La Unión Sindical de Base (USB), la Confederación de Comités de Base (COBAS) y la Confederación Unitaria de Base (CUB) reclaman la renovación de los contratos y el ajuste automático de los salarios «teniendo en cuenta la inflación real«, la introducción por ley de un salario mínimo de 12 euros la hora, la congelación de la subida de los costes energéticos y la reducción de la jornada laboral.

Lo sindicatos también piden la «congelación del gasto militar y del envío de armas a Ucrania, la inversión económica en escuelas, sanidad pública y transportes, y la garantía salarial para los parados y subempleados«.

En Roma (centro), pese a que la adhesión a la huelga del personal que opera el transporte público ronda el 23% según los datos de Roma Movilidad, el servicio de metro permanece anulado fuera de las horas punta y los autobuses circulan con retrasos considerables.

La ciudad de Milán (norte) ha cancelado varias líneas de tren, registra importantes retrasos en el servicio de metro y no garantiza la circulación de autobuses y tranvías fuera de la franja horaria comprendida entre las 15.00 y las 18.00, mientras que en Nápoles (sur) se ha cerrado la línea 1 del metro y los servicios de funiculares durante buena parte del día, mientras que se ha limitado la circulación de tranvías y autobuses.

La capital siciliana, Palermo (sur), también ha visto afectada su movilidad debido al paro de cerca del 80% de los empleados del servicio de tranvía, lo que ha obligado a cancelar prácticamente todos los viajes, según la empresa de transportes local.

La jornada de protesta se ha extendido también, aunque con alteraciones menos significativas, al sector educativo, sanitario y de la recogida de basuras, y afecta principalmente al transporte público.

Los tres sindicatos mayoritarios en el país, la Confederación General Italiana del Trabajo (CGIL), la Confederación Italiana de Sindicatos de Trabajadores (CISL) y la Unión Italiana del Trabajo (UIL), no han secundado la jornada de huelga.

Por: Agencia