Tras el rezo del Regina Caeli de este domingo 8 de abril, el Papa Francisco recordó que “a esta misma hora, muchos fieles se reúnen en torno a la venerada imagen de María en el Santuario de Pompeya, para dirigirle la Súplica que brotó del corazón del Beato Bartolo Longo”.
“Arrodillado espiritualmente ante la Santísima Virgen, le confío el ardiente deseo de paz de tantos pueblos que en diversas partes del mundo sufren la calamidad insensata de la guerra. A la Santísima Virgen le presento en particular los sufrimientos y las lágrimas del pueblo ucraniano”, dijo el Papa Francisco. señala la nota de Aci prensa.
Asimismo, el Santo Padre pidió “ante la locura de la guerra” seguir rezando cada día el Rosario por la paz. También pidió rezar por los dirigentes de las naciones.
Además, durante las salutaciones el Papa Francisco mandó “un saludo especial al grupo de refugiados ucranianos y sus familias de acogida en Macchie, cerca de Perugia”.
El Beato Bartolo Longo
Bartolo Longo se convirtió en un gran devoto de Nuestra Señora del Rosario, especialmente por una imagen que recibió de manos del P. Radente en 1875. Se hizo terciario dominico y se convirtió en un gran promotor del rosario.
La imagen que recibió Longo muestra a la Virgen sentada en un trono sosteniendo al niño Jesús y con un rosario en la mano, con Santo Domingo y Santa Catalina de Siena a sus pies.
En poco tiempo la imagen, que preside el Santuario actualmente, hizo que Dios obrara una gran cantidad de milagros.
El primer milagro fue la curación de una niña de doce años, Clorinda Lucarelli, que sufría de epilepsia, que había sido diagnosticada con un mal calificado de “incurable” por los médicos de la época.
En declaraciones a ACI Prensa, el Arzobispo de Pompeya, Mons. Tomasso Caputo, dijo que el Beato Bartolo Longo “hizo un enorme trabajo de promover la devoción a la Virgen, invitando a la gente a rezarle para que difunda su misericordia”.
Por: Agencia