El Museo Rodin, hogar de los trabajos del genial escultor francés Auguste Rodin (1840-1917), inaugura este sábado en la megalópolis oriental china de Shanghái su primera sucursal en el extranjero, con una exposición en la que se podrá disfrutar de más de un centenar de obras.
El Centro de Arte Rodin de Shanghái, asociado con el parisino Museo Rodin y con el Instituto de Escultura de China y la Academia de Shanghái de Bellas Artes, ocupará el pabellón francés de la Expo que se celebró en 2010 en esa ciudad, unida a Francia por la cultura y la historia, indica la nota de EFE.
La primera exposición sobre el considerado como ‘padre de la escultura moderna’ llevará el nombre de ‘Rodin: una bisagra hacia la modernidad’ y se articulará en seis partes principales y otras dos especiales.
Los visitantes podrán contemplar más de un centenar de obras, incluyendo esculturas, pinturas, piezas de porcelana o vídeos que presentan el camino artístico que recorrió Rodin y la influencia que su estilo sigue ejerciendo sobre las creaciones artísticas contemporáneas en todo el mundo.
Según los organizadores, se contará con importantes obras del escultor galo como ‘El pensador’, ‘La edad de bronce’, ‘Eva’, ‘Monumento a Balzac’ o ‘Los burgueses de Calais’.
Asimismo, en la exposición figurarán una treintena de trabajos de 17 artistas cercanos a Rodin como, por ejemplo, su maestro, Albert-Ernest Carrier-Belleuse, que permitirán entender la próspera escena escultórica del siglo XIX y principios del XX en una sección llamada ‘Rodin y sus coetáneos’.
Dado que el nuevo centro cultural se encuentra en los terrenos de la Expo 2010 de Shanghái, una de las dos secciones especiales de la exposición estará vertebrada precisamente a través de las Exposiciones Universales, uniendo la mencionada con la celebrada en 1900 en París.
Fue aquel evento el que lo elevó al nivel de leyenda, con una retrospectiva a gran escala -más de 150 piezas- que tuvo una gran acogida por parte del público, tanto francés como extranjero, lo que le valió que le ofrecieran una serie de exposiciones por toda Europa y lo convirtió en una celebridad.
Otra sección destacada es la dedicada no a obras creadas sino poseídas por Rodin, quien tenía un gran interés en el arte chino y acumuló una importante colección relacionada con la cultura del gigante asiático, algo que, según el Centro de Arte Rodin, «encarna el espíritu del arte sin fronteras».
En concreto, la exposición mostrará 16 obras y objetos chinos coleccionados por Rodin como una estatua de bronce de Guanyin -la diosa budista de la misericordia y la compasión- de la dinastía Ming (1368-1644), figuras de terracota de las Sui (518-618) y Tang (618-907) o piezas de bronce y porcelana de la Qing (1636-1912).
Más allá de su exposición permanente con trabajos de Rodin, el nuevo Centro de Arte organizará también intercambios académicos y prácticas entre artistas, investigadores, educadores y estudiantes, y buscará acercarse al gran público con iniciativas como representaciones o mercados de arte.