miércoles, diciembre 25

El MET de Nueva York rescata el arte afrodescendiente

El Museo Metropolitano de Arte de Nueva York (MET) rescata del ostracismo al movimiento «Harlem Renaissance» nacido del gran desplazamiento migratorio de los negros del sur rural al norte de Estados Unidos en la primera mitad del siglo XX.

A partir del domingo, a través de 160 pinturas, esculturas, fotografías y literatura de la diáspora afrodescendiente, la exposición «The Harlem Renaissance and Transatlantic Modernism» da una idea de la vida cotidiana de los nuevos barrios negros como Harlem en Nueva York y el South Side de Chicago en los años 1920-1940 que surgieron de la Gran Migración.

La exposición es «una apertura y una ampliación de la historia del arte y de sus relatos«, explicó a la AFP el director del MET, el austriaco Max Hollein esta semana en la presentación a la prensa.

Con las obras que salieron de los pinceles de grandes artistas de la época, opacados por las tendencias de un siglo rico en figuras del arte de los blancos, la muestra subraya «el papel fundamental del movimiento en la configuración de la representación del sujeto negro moderno y, de hecho, del propio tejido del arte moderno de principios del siglo XX«, según Hollein.

Las obras proceden principalmente de universidades donde tradicionalmente estudiaron los afrodescendientes y museos estadounidenses y europeos, pero también de los herederos que conservaron este acervo único.

Como Madeline Murphy Rabb, a quien le costó reprimir las lágrimas al admirar el cuadro «Girl With Pomegranate» (1940), de su tía abuela Laura Wheeler Waring.

«He trabajado durante décadas para que mi tía abuela fuera reconocida como se merecía«, explica a la AFP. «Siempre había sido mi objetivo que un público más amplio viera esta importante obra» en Estados Unidos, a menudo marcado por la discriminación y el racismo, y donde «tantos blancos y algunos negros tienen estereotipos sobre lo que pintan los artistas negros«, agrega.

El mecenas de la exposición, Darren Walker, presidente de la Fundación Ford, agradeció que los descendientes de artistas afroamericanos «hubieran conservado obras cuyo valor conocían en una época en que no lo tenían«.

Relaciones interraciales

Entre los artistas destacados figuran Charles Alston, Miguel Covarrubias, Aaron Douglas, Meta Warrick Fuller, William H. Johnson, Archibald Motley, Winold Reiss, Augusta Savage, James Van Der Zee y Laura Wheeler Waring.

Asimismo, expone la obra de artistas negros que vivieron y trabajaron en Europa en yuxtaposición con retratos de la diáspora africana internacional realizados por europeos como Henri Matisse, Edvard Munch, Pablo Picasso, Kees Van Dogen o Ronald Moody.

Hollein espera así sacar de la marginalidad y resaltar el movimiento «Harlem Renaissance«, que no estaba ni estructurado en el tiempo ni se limitaba a Harlem.

«Esta exposición es una de las vías para cambiarlo«, dice.

La exposición cuenta aspectos sociales como la identidad queer, el colorismo y las tensiones de clase, y las relaciones interraciales de este movimiento New Negro que llegó a su fin en la cúspide del movimiento por los derechos civiles de la década de 1950.

Más allá de Nueva York y del periodo de entreguerras, el MET rinde homenaje al pintor de Chicago Motley (1891-1981), al poeta Langston Hughes (1901-1967), que escribió hasta su muerte, y al pintor Jacob Lawrence, reconocido en el extranjero y que trabajó hasta su fallecimiento en 2000.

El «Renacimiento de Harlem» también se asocia a pensadores, escritores y sociólogos afroamericanos como William Edward Burghardt «W.E.B.» Du Bois (1868-1963) y Alain Locke (1885-1954).

En su libro «The New Negro» (1925), Locke se interesaba por el potencial de la «generación más joven» de negros para conducir a la sociedad hacia «algo cercano a la emancipación espiritual«, más que hacia las cuestiones políticas clásicas.

«El ensayista instó a los pintores afroamericanos a abrirse a las artes visuales de África y al arte moderno europeo«, recuerda la conservadora del museo Denise Murrell.

William H. Johnson (1901-1970), por ejemplo, emigró de su Carolina del Sur natal a Nueva York antes de vivir en Túnez, Francia y Dinamarca.

La Gran Migración fue el mayor movimiento de afroamericanos que huían del sur rural y segregado en busca de libertad en ciudades del norte liberal y abierto.

Por: Agencia