El gobierno de centroderecha noruego, que salió derrotado de las legislativas de septiembre tras ocho años en el poder, presentó su dimisión este martes, lo que abre la vía a la formación de una nueva coalición de centro-izquierda.
Tras dos mandatos sucesivos marcados por varias crisis, la primera ministra conservadora Erna Solberg presentó la renuncia de su gobierno ante el rey Harald V.
«Recomendaré a Su Majestad el Rey que se dirija al líder del Partido Laborista, Jonas Gahr Støre«, dijo Solberg en un discurso pronunciado por la mañana ante el Parlamento, donde su equipo presentó su última propuesta presupuestaria, refiere la AFP en su nota.
Los laboristas y los centristas, ganadores en las elecciones legislativas del 13 de septiembre, acordaron formar juntos un nuevo gobierno minoritario.
La nueva coalición bipartita solo contará con 76 de los 185 escaños del Parlamento, por lo que deberá negociar con otros partidos para poder sacar adelante sus leyes.
Por Agencia