El actor y comediante estadounidense Jonah Hill está celebrando sus 39 años bajo una campaña sobre la importancia de la terapia psicológica.
“Stuz” es el nuevo proyecto de Hill junto a la plataforma de streaming Netflix, en donde el actor narra su historia, como paciente, de cómo un terapeuta le ayudó a enfrentar diferentes crisis.
Este documental fue dirigido por el propio Hill y fue grabado en Estados Unidos. Sobre la música, estuvo en manos de Emile Mosseri y la fotografía por Christopher Blauvelt.
En una conferencia, el actor estadounidense aseguró que se siente muy satisfecho con la producción y el lanzamiento de este documental: “estoy muy agradecido de que la película tenga su estreno mundial en un festival prestigioso de cine este otoño, y no puedo esperar a compartirla con el público de todo el mundo con la esperanza de que ayude a los que luchan”.
Este proyecto cuenta con la participación de Phil Stuz, quien es uno de los psiquiatras más destacados del mundo y tiene 40 años ayudando a una inmensa cantidad de personas, entre ellas creativos y líderes empresariales de talla mundial.
Stuz también es conocido por su libro “El Método: las herramientas que activarán tu fuerza interior para cambiar tu vida” publicado en 2012, junto al terapeuta Barry Michels. En este se enfoca en un trabajo terapéutico innovador enfatizado en herramientas, mecanismos y recursos que se pueden desarrollar activando nuestras “fuerzas superiores” para solucionar los problemas.
En pocas podría calificarse como un largometraje que trata sobre una entrevista entre terapeuta y pacientes, pero también es una invitación para aquellas personas que aún no han intentado realizar este método para afrontar todo tipo de momentos críticos y difíciles en su vida.
El documental ofrece una conmovedora reflexión sobre Jonah Hill y sobre su terapeuta, Stutz, el psiquiatra que lucha contra el imparable avance de su enfermedad. El primero nos deja entrever sus problemas de ansiedad, inseguridad, vacío, vergüenza, de su pasado con sobrepeso y de la muerte de su hermano.
Stutz desnuda su alma ante la cámara, hablando también de la muerte de su hermano menor y de esa compleja relación con su madre que ha limitado, en cierto modo, su capacidad para vincularse afectivamente. No duda en hablar de su enfermedad, de cómo el párkinson va más allá de ese temblor en las manos, de ese cuerpo rígido ante el que lucha cada día.
La crítica sobre este proyecto no se ha hecho esperar, ‘Ready Steady Cut’ la catalogó como: “Un documental tranquilizador y conmovedor que en sí mismo es una experiencia humorística, vulnerable y finalmente terapéutica”. A su vez, ‘Decider’ halagó el trabajo del actor estadounidense, nominado al Óscar en dos ocasiones, al escribir: “Crudo, incómodo y conmovedor”.
Por: Agencia