La embarcación humanitaria «Louise Michel«, financiada por el artista británico Banksy, denunció este domingo que permanece retenida por las autoridades italianas en la isla de Lampedusa sin haber recibido una «justificación escrita» mientras hay pateras de migrantes que necesitan asistencia en el Mediterráneo.
«Veinticuatro horas después de notificar que nuestro barco está detenido, aún no tenemos una justificación escrita para la detención. Sabemos que hay docenas de barcas en problemas ahora mismo frente a la isla, y aún así evitan que prestemos asistencia. ¡Es inaceptable!», indicaron sus responsables en redes sociales.
La queja se produce tras una fatídica jornada en la que han llegado unos 4.000 migrantes a las costas italianas durante el fin de semana, en su mayoría a la isla de Lampedusa, donde los albergues de acogida están desbordados.
Ayer, la Guardia Costera italiana localizó los cuerpos sin vida de siete personas después de que dos pateras naufragaran en aguas próximas a la isla de Malta, donde pudieron rescatar a diez migrantes.
«Varias vidas se perdieron en dos naufragios ayer. Estas muertes no son un accidente o una tragedia. Son buscadas«, señaló la organización «Louise Michel«.
A Lampedusa llegaron este sábado unos 300 migrantes que viajaban a bordo de siete embarcaciones rescatadas por las patrullas de la Guarda de Finanzas y el barco de «Louise Michel«, en una operación que habría infringido el nuevo decreto migratorio del Gobierno italiano, ya que impide que los barcos humanitarios realicen más de un rescate antes de pedir asignación de un puerto.
Antes, entre el viernes y el sábado, arribaron a la isla unas 2.000 personas en 43 desembarcos diferentes que han saturado la capacidad de acogida de sus albergues, con capacidad para 400, informó la prefectura de Agrigento.
En territorio peninsular, en la región de Calabria (sur), llegaron en la tarde del viernes otros 550 migrantes, la mayoría de los cuales desembarcó en Crotone, la localidad en la que hace un mes murieron 91 personas tras un naufragio.
Por su parte, el barco de Médicos sin Fronteras (MSF), el Geo Barents, avanzó que llegará la tarde de este domingo al puerto de Bari (sur) tras rescatar a 190 migrantes, y otro buque, el Life Support de la ONG Emergency, socorrió a 161 personas en la jornada de ayer.
Además, el barco «Ocean Viking«, de la ONG SOS Mediterranee, denunció que tuvo que detener sus operaciones de salvamento tras ser amenazada con disparos al aire por la guardia costera de Libia en aguas internacionales.
Italia y Malta han visto como este fin de semana el número de embarcaciones que viajan por el Mediterráneo central se ha multiplicado, mientras Túnez asegura haber detenido la salida de más de 70 pateras en medio de una ola que no cesa desde hace semanas.
En lo que va de año ya han desembarcado más de 25.000 inmigrantes en las costas italianas, más del triple que los 6.500 del mismo periodo del 2022, según datos oficiales.
Por: Agencia