El actor estadounidense James Franco dijo que lamenta haberse acostado con estudiantes en su escuela de cine, rompiendo su silencio sobre las acusaciones de conducta sexual inapropiada en una entrevista divulgada este jueves.
Franco, nominado al Óscar en 2011 por la película «127 horas», fue acusado por cinco mujeres en 2018 de explotación durante escenas de desnudos en su escuela Studio 4, en el norte de Hollywood.
«Mira, voy a admitirlo, me acosté con esas estudiantes», dijo Franco, de 43 años, en su primera extensa entrevista sobre los señalamientos. «Durante el tiempo que enseñé, me acosté con estudiantes y estuvo mal. Pero como dije antes, no es por eso que abrí la escuela», comentó el actor en The Jess Cagle Show, transmitido en la plataforma radial SiriusXM.
Franco y sus abogados habían negado antes que hubiese simulado sexo oral en varias actrices, y que retirara un protector de plástico que cubría sus vaginas.
De acuerdo con las acusaciones, también usaba su escuela de cine para cazar a mujeres sexualmente disponibles, pidiendo a las estudiantes a bailar alrededor de él en toples en una escena sin guión, y «[haciéndole] creer a todo el mundo que habría papeles disponibles a cambio de actos sexuales o de quitarse las blusas»,
En la entrevista con Cagle, Franco negó haberse acostado con estudiantes en su clase llamada «Escenas de sexo», y dijo que se trataba de un «título provocativo», pero que no incluía una instrucción específica sobre escenas íntimas.
«No era un plan maestro de mi parte», dijo.
«Pero, sí, hubo algunos momentos en los cuales tuve algo consensual con una estudiante, y no debí» hacerlo, subrayó.
Presionado sobre como él no comprendía el desequilibrio de poder entre una estrella de Hollywood y sus estudiantes de cine, Franco argumentó que reemplazó su adicción al alcohol con adicción al sexo y a su propio estatus de celebridad.
«Supongo que lo que pensaba en ese momento era ‘si es consensual, ok’. (…) Claro, yo sabía, hablé con otra gente, otros profesores… probablemente no está bien», declaró.
«En aquella época no lo tenía claro, como he dicho. Entonces se reducía a algo como ‘si esto es consensual, creo que está bien. Somos todos adultos'», admitió.
Por Agencia