Estados Unidos inició el proceso para «reubicar temporalmente» su embajada en Ucrania, que cesará sus operaciones en la capital, Kiev, y se trasladará a la mayor ciudad del oeste del país, Lviv, cerca de la frontera con Polonia.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, anunció este lunes en un comunicado que ha ordenado esa medida por «prudencia» y para garantizar «la seguridad del personal» diplomático en la nación.
«Estamos en el proceso de reubicar temporalmente las operaciones de nuestra embajada de Kiev a Lviv debido a la drástica aceleración en el aumento de tropas rusas (en la frontera de Ucrania)», afirmó Blinken.
Esa decisión llega dos días después de que Estados Unidos ordenara la salida de Ucrania del personal no esencial de su embajada, y la suspensión de los servicios consulares de esa legación diplomática.
Según el diario The Wall Street Journal, el Departamento de Estado ha ordenado la destrucción de ordenadores y otros equipos para conectarse a redes de la embajada en Kiev, además del desmantelamiento del sistema telefónico de la misión.
Los materiales confidenciales que se guardaban en la embajada llegaron este domingo al aeropuerto de Dulles (Virginia), en las afueras de Washington, junto a 56 trabajadores de la misión diplomática, según un documento interno obtenido por el diario.
Blinken insistió en su comunicado en que el traslado de las operaciones de la embajada a Lviv (Leópolis), situada a unos 70 kilómetros de la frontera con Polonia, es una «medida de precaución prudente» que «no socava en absoluto» el compromiso de Estados Unidos con Ucrania, según detalla EFE.
«Devolveremos a nuestro personal a la embajada (en Kiev) en cuanto lo permitan las condiciones», prometió.
El jefe de la diplomacia recalcó que los ciudadanos estadounidenses que sigan en Ucrania deberían «abandonar el país inmediatamente», tres días después de que la Casa Blanca les rogara hacerlo en un plazo máximo de 48 horas.
«El camino de la diplomacia sigue disponible si Rusia decide tomarlo de buena fe», aseguró Blinken.
Las tensiones entre Kiev y Moscú han aumentado desde noviembre pasado, después de que Rusia emplazara más de 100 mil efectivos en las cercanías de la frontera ucraniana, lo cual disparó las alarmas en Ucrania y Occidente, que denunció los preparativos para una invasión.
Estados Unidos insiste en que un ataque ruso a Ucrania puede ser «inminente», mientras que Rusia niega que planee una invasión y alega que tiene el derecho soberano a emplazar tropas en cualquier punto de su territorio.
Por: Agencias / Foto: Cortesía