El subsecretario adjunto para América del Sur del Departamento de Estado de Estados Unidos, Mark Wells, advirtió esta semana que la administración de Joe Biden no cesará las sanciones económicas impuestas a Venezuela, hasta tanto se logren avances en las negociaciones políticas entre el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición venezolana.
Durante una entrevista ofrecida al medio de comunicación EVTV Miami, aseveró que el gobierno estadounidense carece de “paciencia ilimitada cuando se trata de observar progresos en estas conversaciones”, pues consideran que se vuelve un riesgo político el extender concesiones a los involucrados.
Recordó que en noviembre del año pasado, las autoridades del país norteamericano tomaron la decisión de ofrecer una licencia de operatividad a la petrolera Chevron, como un “gesto” inicial que daría pie a que se retomaran las negociaciones políticas con la expectativa de obtener progresos.
“Nuestra política sobre Venezuela y las próximas elecciones es muy clara: cuando los que tienen el poder en Venezuela cambien su comportamiento y hagan progresos con respecto a tener elecciones, nosotros cambiaremos nuestras sanciones”, afirmó Wells.
Pese al comentario relacionado con un cambio de actitud por parte del ejecutivo venezolano, el gobierno estadounidense no da muestras de interés en cuanto a reconocer a Nicolás Maduro como presidente de Venezuela, detalla Banca y Negocios.
El subsecretario estadounidense aseguró que el país esperará los resultados de las conversaciones entre los representantes políticos de la derecha e izquierda del país y sostuvo que no hay intenciones de canjear a Alex Saab, presunto testaferro de Maduro, en el contexto de estas negociaciones.
“Es categóricamente falso que tengamos intención alguna de canjearlo en el contexto de estas negociaciones”, aclaró.