domingo, diciembre 22

Ecoanalítica: El segundo trimestre será la prueba de fuego para la economía en 2024

Los próximos tres meses serán determinantes para la economía venezolana, en un contexto de elecciones presidenciales que se celebrarán el 28 de julio, y podrían suponer una «prueba de fuego» de la cual dependerá el crecimiento de este año, según consideran economistas de la consultora Ecoanalítica.

En un evento de presentación de perspectivas de Ecoanalítica, llevado a cabo en el hotel JW Marriott de Caracas este miércoles 24 de abril, los economistas de la consultora hicieron un análisis del entorno económico venezolano y vaticinaron un porvenir de crecimiento tímido, incluso a pesar de la derogación de la Licencia General N° 44, con la cual se suspendió la flexibilización de las sanciones a la industria petrolera por parte de Estados Unidos.

El economista senior de Ecoanalítica, Luis Bárcenas, reconoció que el inicio de 2024 fue lento para la economía, pero observa brotes verdes en el sector comercial, que pueden estar relacionados con una reacción de los hogares y las empresas a una estabilidad de precios motivada por la inflación relativamente baja registrada en los últimos meses.

«Hay que esperar al segundo trimestre, que es quizás la verdadera prueba de fuego para la economía. Si vemos entre abril y junio un incremento relativamente importante en el sector comercial, que es el que agrega más valor actualmente, es probable que se deba a un ajuste de los hogares y las empresas a una inflación que va a seguir a la baja», reflexionó

De concretarse este escenario, la economía retomaría un rumbo positivo tras un primer trimestre flojo, en el cual se estima un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de apenas uno por ciento al compararse con el primer trimestre de 2023, que de por sí fue de caída frente al leve reimpulso que experimentó la economía en 2022.

El economista Asdrúbal Oliveros, socio director de la firma, destacó que esta clase de incremento es positivo, pero sigue siendo muy débil para las necesidades de crecimiento de la economía nacional.

«El primer trimestre ha estado marcado por una economía que muestra ligeros signos de recuperación, pero muy débil. Probablemente vemos crecimiento anual del PIB en torno a uno por ciento, una expansión del consumo privado en torno al dos por ciento, las ventas comerciales las hemos visto creciendo en torno al 10 por ciento. Son indicadores positivos que se suman a la estabilidad de precios y cambiaria, pero siguen siendo muy débiles», analizó.

Los expertos evaluaron el impacto de la reinstauración de las sanciones a la industria petrolera venezolana y mantienen las previsiones que habían hecho en un escenario en el cual no se renovase la Licencia General N° 44, caso en el que la economía podría tener un crecimiento en torno a cuatro por ciento al cierre de 2024.

Las expectativas son cautas debido a que el Estado podría perder cerca de $ 3.000 millones de los ingresos que obtendría si permaneciera la licencia, como resultado de la venta de crudo sin altos descuentos, además de que la producción petrolera no crecerá demasiado.

Al respecto, la economista senior de la firma, Graciela Urdaneta, recalca que, aunque los ingresos disminuyen por la derogación de la licencia, el impacto en la actividad económica no es enorme, especialmente debido a la corta duración de la flexibilización de las sanciones.

«Hubo mucha expectativa al rededor de esta licencia, pero era de apenas seis meses. El efecto que puede tener es bastante reducida. Por eso veo más importancia en Chevron que tuvo efecto con la inyección de divisas en la economía. La Licencia General N° 44 tuvo un efecto muy limitado por el poco tiempo», razonó.

Un factor clave para el devenir económico en estos próximos meses es la ejecución de gasto público, que suele incrementar previo a elecciones de envergadura, como las presidenciales o las parlamentarias. Si la administración de Nicolás Maduro incrementa sustancialmente su gasto, podría alterar el equilibrio que han tenido tanto la inflación como el tipo de cambio.

En este sentido, Bárcenas considera que hay margen suficiente para soportar cuotas ligeras de gasto público, entre las que no descarta incluso un incremento de ingresos —más no de salarios— por vía de bonificaciones sin un mayor impacto en la estabilidad cambiaria.

«Probablemente se produzca un incremento a nivel de bonificaciones. Probablemente no tenga influencia porque, dentro de la regulación económica y monetaria del país, se considera ese escenario. Hay fuerza suficiente para licuar ese exceso de dinero producto de ese aumento», acotó.

Por: Agencias / Foto: Cortesía