Pedro Palma, economista, socio-director de Ecoanalítica y PH.D en economía, pronosticó que la economía venezolana seguirá creciendo en 2023, pero de una manera «muy marginal».
Explicó que el futuro económico del país, debido a las limitantes petrolera y el nivel de inversión, restringirán «enormemente» los niveles de actividad económica de Venezuela.
«En Venezuela está todo por rehacerse, por eso hay oportunidades. El reto es identificarlas y saber cuáles son más a corto plazo que otras», añadió.
Palma destacó que hay algunas áreas que abren oportunidades de inversión a futuro, como el servicio técnico y profesional, además de alimentos.
Advirtió que el anclaje del tipo de cambio, además de abaratar los productos importados, produjo una perdida en la capacidad de competitividad del aparato productivo interno y estimulo a la importación, siendo esta insostenible.
El economista recordó que este anclaje fue una de las políticas aplicadas por el gobierno nacional para abaratar los productos que se importaban debido a la alta dependencia de estos para abastecer el mercado local.
Indicó que otra política que se aplicó para reducir la hiperinflación fue el encaje legal que prácticamente aniquiló el crédito.
«En Venezuela actualmente no hay crédito y eso les restringe tener capital de trabajo. Eso frena la actividad económica. Nuestra cartera de crédito es de 600 millones, esta equivale a la que tiene un banco mediano en Colombia», acotó.
Por: Agencia