viernes, noviembre 22

Día del Libro, un vehículo para el cambio y la cohesión social

El 23 de abril es el Día Mundial del Libro y de los Derechos de Autor. La propuesta de esta efeméride fue presentada por la Unión Internacional de Editores (UTE), y presentada por el gobierno de España a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), quien la aprobó en 1995.

La fecha coincide con el fallecimiento de Miguel de Cervantes, William Shakespeare y Garcilaso de la Verga, tres figuras trascendentes de la literatura universal. A propósito de esta celebración, la UNESCO impulsa la creatividad, la diversidad y la igualdad en el acceso al conocimiento. Anualmente, Naciones Unidas nombra a una ciudad como Capital Mundial del Libro: Para 2024, la designación recayó sobre Estrasburgo, ubicada en el noroeste de Francia.

«La UNESCO y el Comité Consultivo de la Capital Mundial del Libro quedaron impresionados por el interés de Estrasburgo por el libro como medio para afrontar los retos de la cohesión social y el cambio climático», indicó Audrey Azoulay, directora general de la UNESCO.

Según detalla el Diario de las Américas, la organización argumentó que en esa ciudad francesa existe iniciativas para la promoción del libro, dentro de las cuales destacan el programa Leer para el Planeta.

Además, Estrasburgo «destaca el papel de los libros para compartir las preocupaciones medioambientales y los conocimientos científicos, al tiempo que da prioridad a los jóvenes como agentes del cambio».

La función de un libro

Desde Naciones Unidas se resalta el rol de un libro para entretener y educar. De allí que el Día Mundial del Libro busca garantizar el encuentro con la reflexión y el aprendizaje, al tiempo que se erigen como motores del encuentro cultural.

«En tiempos de incertidumbre, muchas personas recurren a los libros como refugio y fuente de sueños», asevera la UNESCO.

Asimismo, mediante la lectura se desarrolla la empatía y se fortalece la seguridad emocional. En este punto, neurólogos del Hospital Quirónsalud Córdoba, España, indican que los conocimientos derivados de la acción de leer disminuyen el estrés «ante el abordaje de situaciones desconocidas y facilitan las relaciones sociales».

De acuerdo con lo divulgado por Europa Press, «al leer se activan unos procesos cognitivos que consiguen interpretar signos que posteriormente generan esquemas de conocimiento y finalmente producen emociones».

Por: Agencias / Foto: Cortesía