La Corte Suprema de Estados Unidos (EEUU) puso fin a la discriminación positiva por temas raciales para el ingreso a las universidades del país, al considerar que algunas casas de estudio violaron la Constitución al valerse de este proceso de admisiones.
“Muchas universidades han (…) concluido, erróneamente, que la piedra angular de la identidad de un individuo no son los desafíos superados, las habilidades construidas o las lecciones aprendidas, sino el color de su piel. Nuestra historia constitucional no tolera esa decisión”, reza la sentencia, citada por Página 12, e impulsada por el juez John Roberts, presidente de la Corte.
El fallo fue apoyado por los cinco magistrados conservadores. Las tres juezas progresistas se opusieron.
Los letrados que estuvieron a favor consideran que el proceso de admisiones de Harvard y la Universidad de Carolina del Norte violan la decimocuarta enmienda de la Constitución, que garantiza la igualdad ante la ley.
En el caso de Carolina del Norte, la acusación sostenía que la política de admisiones era discriminatoria contra los candidatos blancos y asiáticos frente a los afroamericanos, hispanos y nativos americanos; mientras que en el de Harvard, un grupo de estudiantes asiáticos denunció el uso de criterios subjetivos para limitar el número de candidatos aceptados, reseñó EFE.
Opiniones de los jueces
La jueza progresista Sonia Sotomayor escribió en su opinión de disentimiento que la decisión de los magistrados conservadores “revierte décadas de precedentes y de importante progreso”.
“La igualdad de oportunidades en la educación es un requisito previo para conseguir la igualdad racial en nuestra nación”, defendió.
La jueza afroamericana Ketanji Brown Jackson, en su propia opinión de disentimiento, dijo que “considerar que la raza es irrelevante en la ley no hace que sea así en la vida”.
Sin embargo, el juez Clarence Thomas, también afroamericano y uno de los más conservadores de la corte, acusó a Jackson en una opinión concurrente de considerar que “todos los resultados en la vida se pueden atribuir sin ninguna duda a la raza”.
Hispanos serán los más afectados
El doctor en economía y docente de una universidad EE.UU., Javier Mejía, explicó que la decisión de la Corte seguramente impactará negativamente la probabilidad de los hispanos para ser admitidos, “en particular en los programas más competitivos».
“Se sentirá, especialmente, en carreras como la ingeniería y las denominadas ciencias duras, lo que resulta preocupante, porque son estas profesiones las que tienen mayores ingresos al graduarse», valoró.
Reacciones ante la sentencia
En un comunicado criticando la decisión, la ex primera dama estadounidense Michelle Obama dijo que su corazón “se rompe por cualquier joven que se esté preguntando qué le depara el futuro y qué tipo de oportunidades se les abrirán”.
En esa línea, el presidente de EEUU, Joe Biden, llamó este jueves a las universidades a que sigan garantizando la diversidad racial entre sus alumnos, después de que la Corte Suprema acabara con la discriminación positiva por temas raciales.
“En la práctica, el tribunal ha acabado con la discriminación positiva en las admisiones en la universidad. Estoy totalmente en desacuerdo con la decisión porque han entendido mal la discriminación positiva”, declaró en un mensaje a los medios en la Casa Blanca.
Por el contrario, el expresidente Donald Trump (2017-2021) consideró que este es “un gran día para Estados Unidos” gracias a la decisión judicial.
En su opinión el fallo recompensará a “las personas con habilidades extraordinarias” y hará que EEUU sea “competitivo con el resto del mundo”.
Por: Agencia