Danelo Badell, el “Cañón de la Gaita”, visitó por última vez la Basílica de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá para partir de al encuentro con Dios. La llegada al templo mariano fue sobre los hombros de sus familiares y amigos, quienes cargaron su féretro para la misa de cuerpo presente.
Durante la eucaristía, presidida por Nedward Andrade, párroco rector de la Basílica, miembros de la Sociedad de los Servidores de María hicieron guardia de honor al sarcófago del “Cañón de la Gaita”, un gesto solo reservado para quienes rindieron honores, en vida, a Dios a través de la María Santísima de Chiquinquirá.
Todo el acto religioso, así como el homenaje gaitero, llevado a cabo en la plazoleta del Santuario Mariano, estuvo colmado de parientes, allegados y fanáticos de la gaita, quienes querían darle un último adiós a la voz detrás de éxitos como: Prefiero Mi Gaita, Los Remedios, Fascinante Venezuela, Toda una Vida, entre otros.
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Para mañana, 23 de noviembre, a las 9.00 de la mañana, está prevista la cremación de los restos de los restos del interprete zuliano.
Badell prestó su voz a las agrupaciones Lagomar, Gran Coquivacoa, Cardenales del Éxito, Gaiteros de Pillopo, VHG, Estrellas del 2000, Iluminación Gaitera, Universidad de la Gaita y otros más, Además también fue director del Instituto Municipal de la Gaita Ricardo Aguirre (IMGRA).
Su fallecimiento ocurrió a los 73 años tras serios quebrantos de salud que lo llevaron a estar hospitalizado hasta ayer 21 de noviembre.
Por: José Manuel Sánchez / Fotos: Cortesía