Corea del Norte probó dos misiles crucero estratégicos de largo alcance, que el líder Kim Jong Un exaltó como un exitoso despliegue de su capacidad de ataque nuclear táctico, informó el jueves la prensa estatal.
Kim supervisó el lanzamiento de los misiles que recorrieron dos mil kilómetros sobre el mar y expresó «gran satisfacción» por la prueba, indicó la agencia oficial KCNA. Señaló que los proyectiles lanzados el miércoles alcanzaron los blancos pretendidos, aunque no precisó cuáles eran.
Se trata del último lanzamiento en una serie de ensayos de armas que han agravado las tensiones en la península coreana y aumentado el temor de que Pyongyang realice su primer ensayo nuclear desde 2017, detalla AFP.
El líder norcoreano expresó «gran satisfacción» con las pruebas, diseñadas para aumentar la eficiencia de combate de los misiles «desplegados en las unidades del Ejército Popular Coreano para la operación de armas nucleares tácticas», según KCNA.
Corea del Norte dijo esta semana que sus recientes pruebas de misiles incluyeron ejercicios «nucleares tácticos» para simular un ataque al Sur.
«La última prueba significa que el Norte está operando con capacidad nuclear táctica en misiles de crucero, que son más difíciles de detectar por su vuelo a baja altitud», explicó a la AFP Hong Min, del Instituto de Unificación Nacional de Corea.
«Es una prueba de la capacidad de Pyongyang de montar ojivas nucleares», indicó y añadió que los misiles de crucero también pueden tener trayectorias de vuelo irregulares que dificultan su interceptación.
«Desarrollo interminable»
Tras las pruebas, Kim dijo que Corea del Norte debe «ampliar la esfera operativa de las fuerzas nucleares estratégicas».
«Kim Jong Un remarcó que debemos centrar todos los esfuerzos en el desarrollo interminable y acelerado de las fuerzas armadas nacionales de combate nuclear», indicó KCNA.
Para Kim, la obtención de armas nucleares tácticas -más pequeñas y livianas, diseñadas para usar en el campo de batalla- es una prioridad planteada en un congreso del partido en enero de 2021, y este año prometió desarrollar las fuerzas nucleares norcoreanas lo más rápidamente posible.
El país revisó sus leyes nucleares en septiembre para permitir ataques preventivos, y Kim declaró que Corea del Norte es una potencia nuclear «irreversible», lo cual cierra la puerta a una negociación sobre su arsenal.
Desde entonces, Seúl, Tokio y Washington han intensificado los ejercicios militares conjuntos, incluyendo el desplazamiento de un portaviones estadounidense de propulsión nuclear que enfureció a Pyongyang, que consideró esas maniobras como el ensayo de una invasión.
En respuesta, Corea del Norte «decidió organizar maniobras militares simulando una guerra real», con ejercicios que recrean ataques a puertos, aeropuertos e instalaciones del mando militar de Corea del Sur, indicó el lunes KCNA.
Las unidades del ejército norcoreano involucradas «en la operación de armas nucleares tácticas realizaron las maniobras del 25 de septiembre al 9 de octubre para verificar y evaluar la capacidad de disuasión de guerra y contraataque nuclear», señaló la agencia, al asegurar que Kim supervisó esos ejercicios.
Informó también que el misil norcoreano del 4 de octubre, que sobrevoló Japón y desató alarma en ese país, fue un «nuevo tipo de misil balístico tierra-tierra de alcance intermedio».
La ola de publicaciones de KCNA sobre las recientes pruebas de armas es una señal de que Pyongyang está preocupada por los recientes ejercicios conjuntos de su vecino del sur con Estados Unidos, según analistas.
Por: Agencias / Foto: Cortesía