Un tribunal argelino condenó a muerte el jueves a 49 personas por el linchamiento en 2021 de un hombre acusado erróneamente de provocar un incendio forestal, pero esta pena debería ser conmutada a cadena perpetua debido a una moratoria de las ejecuciones.
Los acusados fueron declarados culpables del linchamiento de Djamel Bensmail, un artista de Miliana (120 km al oeste de Alger), quien se había presentado como voluntario en el pueblo de Larbaa Nath Irathen, en la región de Cabilia (noreste), para ayudar a apagar un incendio que causó 90 muertos en menos de una semana en agosto de 2021.
Aunque la pena de muerte está prevista por el código penal en Argelia, ya no es aplicada en virtud de una moratoria en vigor desde 1993.
Los acusados, que comparecían ante el tribunal de Dar El Beida -en los suburbios este de Argel-, eran procesados por «actos terroristas y subversivos contra el Estado y la unidad nacional» y «homicidio voluntario con premeditación», según la agencia oficial argelina.
Otras 28 personas fueron procesadas en el marco de este caso y condenadas a penas de dos a diez años de cárcel. Otras 17 fueron absueltas.
Tras haber escuchado que se sospechaba que él inició el incendio, Djamel Bensmail, que tenía 38 años, se entregó a la policía.
Imágenes difundidas por las redes sociales mostraron a la muchedumbre rodeando la camioneta de la policía y sacando al hombre del vehículo por la fuerza.
Bensmail fue golpeado y después quemado vivo. Varios jóvenes se tomaron selfis frente a su cadáver.
«Esa violencia no puede ser tolerada»
Cuando ocurrieron los hechos, que provocaron una ola de indignación en todo el país, las imágenes del linchamiento -que se volvieron virales- fueron comentadas con la etiqueta #JusticePourDjamelBenIsmail.
Los que tomaron selfis intentaron borrar los rastros, pero internautas de todo el país recopilaron videos e hicieron capturas de pantalla para que el crimen no quedara impune.
Las fotos de las personas identificadas en los videos se difundieron por toda la red.
Las detenciones tuvieron lugar en varias regiones de Argelia. Algunas personas implicadas en el linchamiento fueron entregadas a la policía por sus propias familias.
Amnistía Internacional pidió a las autoridades «enviar un mensaje claro de que esa violencia no puede ser tolerada».
La Liga Argelina de Defensa de los Derechos Humanos (LADDH) declaró que «las escenas del linchamiento e inmolación del presunto pirómano, que en realidad se trataba de un joven artista que vino a ayudar a los damnificados, eran impactantes».
El padre de la víctima, Nuredin Bensmail, fue tachado de un héroe nacional por llamar a la calma y a la fraternidad entre argelinos.
«Su gesto, que debe inscribirse en el panteón mundial de los actos fundadores de la nobleza humana, de la tolerancia y de la rectitud, pocos hombres han sido o serán capaces de realizarlo», había elogiado el periodista y escritor Mohamed Badaui en su cuenta Facebook.
Fragmentos de los videos difundidos por los acusados en las redes sociales, que muestran detalles del crimen, se proyectaron durante el juicio que se abrió el martes.
Estos videos muestran el linchamiento de Djamel Bensmail, despojado de sus objetos personales -en particular su teléfono móvil-, y quemado vivo.
Por: Agencia