Rodeado de familiares y amigos, con las banderas de República Dominicana y Venezuela, despidieron al legendario cantante de merengue Rubby Pérez, quien perdió la vida tras el derrumbe del techo de la discoteca Jet Set.
Sus restos fueron velados en el Teatro Nacional Eduardo Brito, donde el Ministerio de Cultura realizó los actos póstumos en su honor.
Venezuela siempre fue un país especial para Rubby, quien en numerosas ocasiones expresó el cariño que sentía por la tierra que lo recibió en los años ochenta y construyó desde ese tiempo una relación llena de amor, en la que el cantante dominicano era considerado como artista nacional. Incluso en una entrevista él se «autodefinió dominico-venezolano».
«Los venezolanos me aman tanto como a cualquier artista venezolano (…) Un día me puse a llorar, porque ellos tienen un mes que es del artista venezolano, no sé si ahora será igual, pero antes era así, y en ese mes no tocan música de otro artista que no sea de Venezuela y yo oí Rubby Pérez Volveré, talento nacional, yo dije ¡Dios mío! y entonces de allí en adelante, yo dije el pueblo de Venezuela va a tener mi corazón para toda la vida y así se va a quedar, yo me autodefinió dominico-venezolano», fueron las palabras dichas por el inolvidable artista, cuyo legado musical trascendió fronteras y se quedó grabado en millones de corazones.
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Por: Redacción Espectáculos / Foto y video: Cortesía