La cifra de réplicas registradas en El Salvador entre el martes, cuando ocurrió un fuerte sismo de magnitud 6,8 con epicentro en la costa del Pacífico, y las 12.30 hora local (18.30 GMT) de este jueves asciende a 157, de acuerdo con el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN).
La entidad gubernamental señaló que del total de temblores, solo 44 han sido sentidos por la población, principalmente por residentes en la zona este del país, con magnitudes que oscilan entre 3,5 y 5,4.
El temblor principal, de magnitud 6,8, sucedió a las 18.22 hora local del martes (00.22 GMT del miércoles) frente a la costa este del departamento de Usulután, 66 kilómetros al sur de la playa El Espino, de acuerdo con información del centro del monitoreo del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Los datos señalan que el sismo tuvo una profundidad focal de 51,48 kilómetros y no existe amenaza de tsunami para El Salvador, apuntó el MARN.
Según un informe especial del MARN, por las características de las señales registradas, «el origen de esta actividad sísmica es atribuido al proceso de subducción de las placas tectónicas Cocos y Caribe, y no representa amenaza de tsunami para El Salvador«.
Agrega que «existe una probabilidad alta que se continúen registrando eventos con magnitudes entre 3,8 y 5,0, en los próximos días«, y que «la probabilidad de un sismo de similar magnitud o superior al evento principal es muy baja, aunque no se puede descartar completamente su ocurrencia«.
El sismo provocó deslizamientos de tierra en algunas zonas del país, daños materiales en al menos seis viviendas y en tres escuelas públicas, según fuentes oficiales que no han reportado ni víctimas ni fallecidos.
La mayoría de los sismos que se producen en El Salvador habitualmente tienen su origen en aguas del océano Pacífico y a mucha mayor profundidad.
La última vez que El Salvador fue asolado por los potentes movimientos telúricos fue en 2001, cuando se produjeron dos terremotos de 7,7 y 6,6, los cuales dejaron cientos de fallecidos, heridos, damnificados y cuantiosas pérdidas.
Por: Agencia