«El deporte no tiene nada que ver con la política. Los Juegos Olímpicos de Invierno no es lugar para el postureo político. Quienes se han unido a este error, van a tener que pagar un precio por ello», ha advertido el jueves (9.12.2021) el portavoz de Exteriores, Wang Wenbin, en rueda de prensa.
Según el portavoz chino, los países deben «demostrar espíritu olímpico en lugar de socavar la causa olímpica».
Australia, Gran Bretaña y Canadá han anunciado que se unen al boicot diplomático iniciado por EE. UU. a los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín 2022 por lo que consideran violaciones de derechos humanos perpetradas por las autoridades chinas.
Sí atletas, no representación política
El boicot solo es diplomático, por lo que estos países sí enviarán atletas al evento, que se celebra entre el 4 y el 20 de febrero de 2022 en la capital china.
Por su parte, Nueva Zelanda ha dicho que tampoco enviará ninguna representación diplomática a los Juegos, aunque justificó su decisión por razones de seguridad sanitaria como consecuencia de la pandemia.
Abusos a los derechos humanos
Todo comenzó con el anuncio hace tres días del portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, quien dijo que el Gobierno estadounidense no enviará ninguna representación diplomática ni oficial a los Juegos por «el genocidio y los crímenes contra la humanidad que persisten en Xinjiang, así como otros abusos de derechos humanos» en China.
Por su parte, el Comité Olímpico Internacional se ha pronunciado diciendo que «entiende y respeta» la decisión tomada por Estados Unidos, pero matizando que su primer objetivo es que estén presentes en competición «los mejores deportistas del mundo».
Por Agencia