Catar, uno de los principales mediadores entre el grupo islamista Hamás e Israel, advirtió este martes de que la irrupción de más de mil colonos judíos en la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén pone en riesgo los esfuerzos que se están realizando para reavivar las negociaciones para una tregua en Gaza.
El Ministerio de Exteriores catarí advirtió en un comunicado “del impacto de estas violaciones en los esfuerzos en curso para alcanzar un acuerdo de alto el fuego en la Franja de Gaza”, en un momento en el que Catar, Egipto y Estados Unidos están presionando a Hamás e Israel para que vuelvan a sentarse en la mesa de negociación.
Doha reaccionó así a la irrupción de un mil 400 colonos judíos este martes en la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén, donde se encuentra el tercer lugar más sagrado del islam, la mezquita de Al Aqsa, detalla EFE.
Algunos de los colonos enarbolaron banderas de Israel y rezaron en el lugar pese a tenerlo prohibido, ya que, según el ‘statu quo’ vigente desde 1967, el recinto está reservado exclusivamente al culto de musulmanes, mientras los judíos solo pueden entrar como visitantes.
El departamento catarí instó a la comunidad internacional a “tomar medidas urgentes para detener estos ataques”, en los que también participaron “dos ministros del Gobierno de ocupación israelí y miembros de la Knéset” a los que no identificó.
En uno de esos grupos de colonos estuvo presente el ministro israelí ultra de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, quien es la tercera vez que acude en fechas clave a este lugar de culto para reivindicar el derecho de los judíos a orar en él, provocando el enfado de la población palestina.
Los mediadores entre Israel y Hamás -Catar, Estados Unidos y Egipto- pidieron la semana pasada a las partes enfrentadas que reanuden las negociaciones para una tregua en Gaza, en Doha o El Cairo, el próximo día 15, si bien el grupo islamista anunció que no acudirá a la cita y pidió implementar lo ya acordado con anterioridad.
Esto tiene lugar, además, a la espera de que Irán responda al asesinato del líder político y jefe negociador de Hamás, Ismail Haniyeh, en un ataque atribuido a Israel en Teherán el 31 de julio. EFE