El presidente de Perú, Pedro Castillo, invitó este lunes a inversores y empresas a apostar por su país y rechazó la idea de que su Gobierno pretenda ahuyentar la entrada de capital: “Nosotros no somos comunistas, no hemos venido a expropiar a nadie, no hemos venido a ahuyentar las inversiones”, dijo.
Así se expresó Castillo al intervenir en una sesión protocolar virtual del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) convocada con motivo de la primera visita del gobernante peruano.
Vistiendo su tradicional sombrero de paja y presentándose como maestro de profesión, Castillo se quejó de que quienes buscan un cambio, “en sintonía con el pueblo, en sintonía con los hombres de abajo”, son muchas veces estigmatizados.
Indicó que su Gobierno invita a los grandes inversionistas y empresarios a que lleguen al Perú, un país que describió como “inminente minero” y con “bastante riqueza”, que reclamó debe llegar “hasta el hombre más común”.
No obstante, denunció que, de cada diez niños en su país, cuatro están en el umbral de la anemia y de la pobreza, y advirtió que después de la pandemia ahora son seis niños de cada diez quienes afrontan “esa cruda realidad”.
En ese contexto, Castillo, quien asumió la Presidencia de su país el pasado 28 de julio, indicó que su Gobierno se ha propuesto acabar con las desigualdades y con el “gran flagelo” de la corrupción.
“En el Perú tenemos corruptos de todo calibre. La corrupción es un gran problema en mi país y tenemos corruptos hasta para exportar”, sentenció.
Al dirigirse a la OEA, señaló que debe abrir unos “enormes espacios” para que sea “verdaderamente un espacio netamente equitativo, social, donde se garanticen los derechos humanos” y se hable de una verdadera democracia y de igualdad de oportunidades, sin discriminaciones.
En ese sentido, planteó que la OEA “haga sus reuniones descentralizadas” y salga “de las cuatro paredes” para visitar a los pueblos.
De igual forma, destacó que la pandemia debe dejar como aprendizaje que es el momento “de la más grande unidad de los pueblos”.
Castillo, quien dijo haber batallado durante 21 días con la COVID-19, llamó a pensar en el pueblo y advirtió que el problema sanitario no ha llegado con la pandemia, sino que era histórico.
“¿Acaso antes de la pandemia no había hospitales colapsados, acaso antes de la pandemia no había enfermos formando cola para tener una pastilla, para tener derecho a este derecho constitucional?”, dijo el mandatario.
Hizo en definitiva un llamamiento a “ver la realidad de los pueblos” y cerró su discurso con un “viva la OEA, viva América”.
Por: Agencia