La actriz Lucía Bosé no murió de coronavirus sino que fue sedada “hasta la muerte” por los protocolos sanitarios existentes en los albores de la pandemia por los que la gente mayor “no era la prioridad”. Así lo aseguró este domingo su hijo Miguel Bosé en una entrevista televisiva.
“A mi madre se la sedó hasta la muerte, como se solía hacer con el resto de los ancianos, daba igual quién fuera. No te la dejaban sacar, no podías ir a visitarla”, sostuvo en una conversación con el periodista Jordi Évole.
La entrevista fue concedida tras meses de silencio y polémicas por su reconocido negacionismo de la pandemia. Lejos de lo que se publicó en su día, sostuvo Bosé, la actriz italiana, que falleció en el Hospital General de Segovia el 23 de marzo del año pasado, no murió de coronavirus.
“Mi madre no tenía coronavirus. Mi madre no se murió de covid y eso tiene que parar ya”, señaló el artista, que no quiso precisar más detalles sobre las verdaderas causas del fallecimiento.
Agregó: “Esa es otra historia de la que no quiero hablar aquí porque sería interminable y sacaría cosas tremendamente peligrosas para las personas que se ocuparon de mi madre en ese momento”, apuntó.
Miguel Bosé alejado de las redes
Él pudo despedirse por teléfono aunque “nunca pensé que la iba a perder, la verdad”. Por aquel entonces, ha explicado, “habían saltado los protocolos absurdos estos de la OMS” y se había publicado un vídeo en el que “una doctora explicaba los protocolos a seguir y cuáles eran las prioridades. Ahí contaba que la gente mayor no iba a ser la prioridad”, resaltó.
Bosé llevaba varios meses sin hacer declaraciones y alejado de las redes sociales desde agosto del año pasado. Esto después de protagonizar una cadena de polémicas por sus cuestionables declaraciones sobre el coronavirus y su apoyo a las teorías conspiratorias en torno a la pandemia. “Es la gran mentira de los gobiernos”, comentó.
Por: Agencia