La administración Biden está considerando un nuevo programa para alentar a los inmigrantes venezolanos que tienen un vínculo preexistente en Estados Unido a ir a los puertos de entrada de EEUU en lugar de cruzar ilegalmente la frontera sur, según cuatro fuentes familiarizadas con las discusiones.
La propuesta surge en medio de una afluencia de inmigrantes de esas nacionalidades en la frontera entre Estados Unidos y México, lo que agota los recursos federales y de las ciudades fronterizas. En agosto, 55.333 migrantes encontrados en la frontera eran de Venezuela, Cuba o Nicaragua, un aumento del 175 % desde agosto pasado, según el Departamento de Seguridad Nacional, reseñó CNN.
El plan pretende servir como un proceso ampliado y más ordenado. Si los inmigrantes cumplen con los criterios, entonces serían puestos en libertad condicional en EEUU con la capacidad de trabajar también legalmente.
También se espera que México acepte a varios venezolanos bajo una regla de emergencia pandémica de la era Trump, conocida como Título 42, que permite a las autoridades rechazar a los migrantes en la frontera entre Estados Unidos y México, según dos fuentes.
Los funcionarios de la administración han estado lidiando con la migración masiva en todo el hemisferio occidental durante meses, enfatizando la necesidad de que todos los países ayuden a aliviar el flujo y crear mejores condiciones en el país. El tema volvió a ser tema de discusión la semana pasada en una reunión de cancilleres en Lima, Perú.
El cambio en la demografía con muchos de los inmigrantes ahora de Venezuela, Cuba y Nicaragua es excepcionalmente difícil para EEUU dadas, en parte, las frías relaciones con esas naciones que en gran medida impiden que la administración saque a las personas de esos países.
Por Agencia