El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se reunió este martes en la Casa Blanca con su homólogo israelí, Isaac Herzog, en un intento por avanzar en un alto el fuego en la Franja de Gaza antes de que el próximo mandatario, Donald Trump, asuma el poder en enero, reseña EFE.
En declaraciones a la prensa en el Despacho Oval, Herzog alabó los esfuerzos de Biden por trabajar “día tras día” para lograr la liberación de los rehenes israelíes que Hamás capturó durante el ataque del 7 de octubre de 2023 y que siguen “viviendo un infierno en los calabozos de Gaza”.
“Usted ha estado pensando en el día después, en una posible trayectoria de esperanza para los pueblos de la región, en nuestra capacidad de alcanzar seguridad y paz, pero, primero, debemos rescatar a los rehenes”, señaló Herzog.
Ante estas palabras, Biden murmuró “estoy de acuerdo” y continuó escuchándole con las manos cruzadas sobre el regazo.
“El imperio del mal”
Herzog afirmó que cualquier progreso en la región “empieza en Teherán”, a la que describió como “el imperio del mal”, y añadió que sus aliados, como el grupo chií libanés Hizbulá, están “haciendo todo lo posible” para acabar con el Estado de Israel.
“Esto debe ser un objetivo primordial durante su mandato y durante el mandato del próximo presidente con el objetivo de asegurar que Irán no cumpla con sus intenciones malignas”, subrayó.
El presidente israelí solo aludió a Trump de forma indirecta, aunque la sombra del expresidente y ganador de las elecciones del 5 de noviembre planeaba sobre la reunión.
La visita de Herzog coincide con el proceso de transición de Trump, en el que se están definiendo los miembros de su futuro gobierno, y solo dos días después de que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, dijera que ya había tenido tres conversaciones con Trump desde su elección.
Netanyahu, cuya relación con Biden se ha vuelto cada vez más tensa, indicó este domingo que la “amenaza iraní” ha sido un tema clave en sus conversaciones con el futuro presidente.
Un último intento de tregua
Uno de los principales objetivos de Washington con esta reunión es avanzar en las negociaciones para una tregua entre Israel y Hamás que permita un alto el fuego y la liberación de rehenes israelíes en Gaza, así como la excarcelación de prisioneros palestinos.
Las negociaciones están estancadas desde finales de agosto debido a acusaciones mutuas entre Israel y Hamás de obstaculizar el proceso.
Ante el bloqueo, Catar anunció el sábado que suspendía sus esfuerzos de mediación, aunque aseguró que los retomará “cuando haya la seriedad necesaria para poner fin a la guerra”.
Durante sus declaraciones a la prensa, Biden no hizo comentarios sobre la tregua, limitándose a recibir con agrado un obsequio de Herzog: una pieza arqueológica del Monte del Templo o Explanada de las Mezquitas en Jerusalén y que tenía inscrito el nombre de “José”.
“Como usted sabe, en la Biblia se dice que José fortalecerá a Israel. Y, sin duda, señor presidente, usted lo ha hecho”, dijo Herzog, agradeciendo el apoyo que Biden ha brindado a Israel desde los ataques del 7 de octubre.
Biden respondió recordando cómo su padre, un “cristiano justo”, no comprendía por qué Estados Unidos no reaccionó más rápido en la Segunda Guerra Mundial para evitar el Holocausto nazi.
También repitió una frase que ha mencionado en varias ocasiones: “No hace falta ser judío para ser sionista”, mostrando así su apoyo a la nación israelí.
Bloqueo a la ayuda humanitaria
Ni Biden ni Herzog abordaron ante los medios la creciente preocupación de la comunidad internacional sobre el bloqueo de la ayuda humanitaria en Gaza.
Hace un mes, la Administración de Biden dio a Israel un plazo de 30 días para mejorar la situación y advirtió que, de no cumplir, podrían activarse leyes estadounidenses que restringen la ayuda militar.
El plazo se vence este martes y la situación sigue crítica: en octubre ingresaron solo 990 camiones de ayuda, el número más bajo de 2024, según la ONU, mientras que Washington solicitaba un mínimo de 350 diarios.
Ocho organizaciones humanitarias, entre ellas Oxfam, Refugees International y Save the Children, publicaron una carta en la que sostienen que Israel no ha cumplido con las exigencias de Washington y que la situación en Gaza “es peor que nunca”.
Desde el inicio de la guerra en Gaza, han muerto más de 43.600 personas, según el último recuento del Ministerio de Sanidad del enclave, controlado por Hamás.
Por: Agencias / Foto: Cortesía