El Banco Central de Venezuela (BCV) inició octubre con una intervención cambiaria de 80 millones de dólares, 29 millones más que en la semana anterior, pero 28 millones por debajo del monto con el que arrancó septiembre, un mes que cerró con una venta moderada de divisas, por parte del emisor, que alcanzó los 386 millones de dólares.
El precio establecido para esta intervención fue de 40,60 bolívares por euro, equivalentes a 37,04 bolívares por dólar que es la tasa oficial para todas las operaciones cambiarias de este lunes 7 de octubre.
En comparación con la cotización del 30 de septiembre, esta cotización desciende -1,53%, luego de acumular cuatro semanas consecutivas en alza, mientras el precio del dólar oficial concluyó la semana con un incremento de 0,46% para superar la marca de los 37 bolívares, luego de haberse mantenido todo el año en 36 bolívares.
Así las cosas, la intervención cambiaria del BCV es una herramienta que ha marcado una senda de estabilidad en el mercado cambiario, junto con una importante oferta privada, especialmente de las empresas petroleras que operan en el país, entre las que destaca Chevron.
Sin embargo, los reportes siguen indicando que la oferta en el mercado oficial es claramente insuficiente, lo que genera presión sobre los canales informales, de manera que la distancia que separa al tipo de cambio oficial del precio paralelo se ubicó en 20,76% al cierre de septiembre.
Mientras tanto, la oferta de bolívares en circulación viene subiendo de manera importante; de hecho, en las últimas dos semanas reportadas ha aumentado 8,35%, un crecimiento elevado para los estándares del año, para ubicarse en 140.421,13 millones de bolívares, equivalentes a 3.791,07 millones de dólares al valor oficial.
Analistas esperan un incremento del gasto público importante en este último trimestre que, posiblemente, se ubique por encima de 30%, lo cual podría inducir una aceleración moderada del tipo de cambio, pero no un ajuste drástico para reducir la brecha con el precio del mercado informal.