La primera noche de Dani Alves en la cárcel no fue nada agradable para el brasileño que el viernes fue trasladado al Departamento de Ingresos del Centro Penitenciario de Brians 1 y su semblante lucía desencajado.
Atrás quedó la característica sonrisa del brasileño y su actitud de líder en el terreno de juego, pues de acuerdo a reportes de la prensa en España, ni siquiera quiso comer.
El reporte de las últimas 24 horas indica que tras ser ingresado y pasar la revisión rutinaria al interior del Centro Penitenciario junto con los demás presos que ingresaron el viernes, Alves rechazó comer o tomar agua, aunque finalmente accedió a una fruta y una botella de agua para pasar la noche.
De acuerdo al medio español, Dani Alves no recibirá ningún trato especial en el centro penitenciario y ya antes habían tenido la experiencia de lidiar con un preso famoso como fue el caso de Sandro Rosell, ex presidente del FC Barcelona.
Alves fue desvinculado del Club Universidad que ya no contará con el jugador el resto del semestre y espera su juicio en prisión sobre el caso de agresión sexual que le fue imputado por los hechos ocurridos en una discoteca de Barcelona la noche del 30 de diciembre donde la víctima alega violación, golpes y tocamientos sin su consentimiento.
Por Agencia