Tras la advertencia del director sobre la posible salida de Chevron en Venezuela, la economía venezolana ha entrado en un estado de incertidumbre, con expectativas de un segundo semestre del año marcado por una mayor dificultad y complejidad. Asdrúbal Oliveros, economista y socio-director de Ecoanalítica advirtió que los efectos más adversos se sentirán a partir de julio, impulsados por una serie de factores que amenazan con profundizar la situación económica del país.
«Desde que se hizo el anuncio, la economía entró en expectativas, uno pensaría que los efectos más adversos se van a recibir a partir de julio, es decir, en el segundo semestre, pero desde ya todo los que vivimos en Venezuela, las expectativas es prepararse para ese contexto más difícil, complejo, hay un efecto en devolución porque hay menos dólares y así suben los precios, implicando aumento de inflación, mayor devaluación, menos capacidad de gasto, caída de la producción petrolera», explicó en entrevista con Román Lozinski.
En cuanto a la producción petrolera, «estimamos que en esta primera etapa, de aquí a diciembre entre un 10-15 por ciento de la producción petrolera va a caer y todos esos empleos directos e indirectos». Esta contracción en el sector petrolero, pilar fundamental de la economía venezolana, agrava aún más las perspectivas negativas.
La inflación «el año pasado la inflación termino según la variación oficial en 48 por ciento, este año la estimación en este contexto que estamos conversando es que la inflación supere el 200 por ciento, nuevamente sigue siendo inflación pero es más de cuatro veces la inflación del año pasado. Este incremento exponencial pone en evidencia la situación económica y el desafío que enfrenta el país para contener la escalada de precios».
Ante este panorama, Oliveros insiste en la necesidad de implementar cambios estructurales en el sistema cambiario. «Si no se introducen cambios en el sistema cambiario, es inviable», adviertió. El sistema actual requiere una inyección de divisas cada vez mayor para estabilizar la tasa de cambio, una situación que, dadas las circunstancias, se considera insostenible.
En este sentido, Asdrúbal Oliveros propone una estrategia radical: capitalizar la dolarización informal que ya existe en Venezuela. La propuesta incluye permitir las transacciones en dólares, eliminar el Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras (IGTF), permitir que los bancos puedan realizar transferencias y otorgar préstamos en dólares.
«Si yo vuelvo a permitir las transacciones en dólares, yo elimino el IGTF, establezco que los bancos puedan transferir en divisas, que los bancos puedas prestar en dolares, creo que esas medidas pueden ayudar a la estabilidad cambiaria», argumentó el experto. Si bien estas medidas no serían la solución definitiva, se consideran un primer paso crucial para lograr la estabilidad cambiaria y frenar la espiral inflacionaria.
Por: Agencias / Foto: Cortesía


