Asdrúbal Oliveros, socio director de Ecoanalítica, aseguró que la inestabilidad de Venezuela ha hecho que las empresas venezolanas tengan “apartados de contingencia” y modificaciones en sus estructuras de costos para prever la posible falta de gasolina, agua, luz o transporte.
“Estos cambios se traducen en gastos adicionales para mantener las estructuras con servicios públicos que el Estado no garantiza”, señaló.
Resaltó que las empresas suelen crecer en un país que les dé certidumbre de lo que va a pasar, siendo esto incompatible con la realidad venezolana.
“Hay variables que pueden cambiar de mes a mes y que escapan de tu control”, añadió.
Recordó que el seguro que algunas empresas brindan a sus empleados, sustituye el papel que debe tener la salud pública en el país.
Oliveros destacó que la reducción de la economía venezolana en 80 por ciento en los últimos siete años, dejó empresas que sostienen una estructura para vender poco.
“Muchas empresas no están adaptadas al país que nos quedó, mantienes una estructura para vender poca mercancía”, acotó.
El economista explicó que la subida de costos en Venezuela es mucho “más agresiva” que la de países con estructuras más estables.
Destacó que la dolarización ayuda a que la inflación no sea tan grande como antes, pero, las incomodidades de pagos electrónicos afectan al empresariado.
“Las empresas reciben pagos en efectivo, por proveedores en el extranjero haciendo que estas paguen comisiones altas por pago electrónico”, indicó.
Por: Agencia / Foto: Cortesía